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El abogado Josep Melià Ques (1972), vicepresidente del PI e hijo del histórico y recordado intelectual y fundador de Unió Autonomista en 1977, Josep Meiià Pericás, afirma que en su partido las aspiraciones personales son secundarias. Defiende el liderazgo de Jaume Font y no ve tensiones internas más allá de las "normales" . No aclara con quien pactaría el PI, pero afirma que "será con quien acepte y respete nuestro proyecto".
-¿Cómo ve el actual proceso de construcción del PI?-De manera muy positiva. Estamos siguiendo la hoja de ruta que nos hemos marcado, con mucho trabajo de construcción de estructura. No tenemos la repercusión en los medios de otras formaciones, como es Podemos, que tiene mucha cancha en diferentes televisiones. Nosotros tenemos que hacer una política de proximidad, de creación de grupos, de tejido. Vamos pueblo a pueblo, barriada a barriada para tener la máxima capacidad posible para dar a conocer nuestro mensaje.
-¿De qué manera valora los procesos congresuales del PI?-El 12 de octubre haremos el congreso de Mallorca y después vendrán los de Menorca y Eivissa. Somos un proyecto balear. Impulsar el PI en Menorca y Eivissa es dificultoso porque no tenemos tantos contactos como en Mallorca. Nos hemos de trasladar, son realidades a veces un poco diferentes. Hacer un proyecto balear es complicado, pero en eso estamos porque es un elemento nuclear y esencial de nuestro partido.
-¿Eligirán estos congresos a los candidatos?-No. Conformarán la estructura. Somos un partido muy insularista donde los órganos de cada isla tomarán las decisiones que les competen. Estatutariamente tendrán mucha importancia y mucho peso.
-El PI se solidificacuando la crisis del PP balear es evidente a causa de la sentencia del TIL. ¿Cómo ve la crisis del PP y como debería comportarse el PI?-La coyuntura nos es favorable. En general lo es para todos los partidos que no sean el bipartidismo dominante hasta ahora, el PP y el PSOE. Esta es la tendencia estatal y la tendencia balear. Estamos experimentando un bajón claro del binomio PP-PSOE. Nosotros somos un partido que tiene vocación de disputar espacio electoral PP, que pierde apoyos. Ha decepcionado a mucha gente y podemos recoger este malestar. Queremos una apuesta por un partido de obediencia estrictamente balear. A su vez,la tendencia general conduce a una atomización de la izquierda.
-En su propuesta la defensa de la lengua propia balear es muy importante, pero también lo es una defensa de la clase media que ha padecido la crisis. Su ámbito de influencia es muy amplio...-Somos clarísimos en la defensa de la lengua propia, de la identidad, de la cultura y de las tradiciones baleares. Defendemos esta personalidad colectiva. Defendemos también una financiación justa. Nuestro objetivo a largo plazo es lograr un concierto económico propio para las Balears. A corto plazo luchamos para ir reduciendo la injusticia de la financiación que soportamos. Otro aspecto fundamental es la defensa del pequeño y mediano comercio, ya que el actual Govern sólo favorece a los grandes y pisa a los pequeños. También trabajamos para darle seguridad jurídica al alquiler turístico. Es fundamental que mucha gente que alquila sus propiedades se sienta protegida.
-En las próximas elecciones podría salir un Parlament en el que nadie tenga mayoría absoluta. ¿Con quién pactará e PI? Esa es la pregunta que se hacen muchos potenciales electores suyos...-La gran pregunta que se hacen nuestros potenciales electores es qué políticas defenderemos. Ya las he dicho. Lo más importante es el qué, no el con quién. Haremos énfasis en el qué, en nuestros proyectos. Es prematuro hablar de pactos porque dependerá las aritméticas que se den en las elecciones, sin olvidar que los pactos son coyunturales, son tácticos y determinados por las matemáticas. Pero pase lo que pase, lo más importante es mantener la propia personalidad. Pactaremos desde la protección de nuestras bases programáticas. Es imposible pactar con quien no asuma nuestro programa.
-Desde esta perspectiva, parece posible un pacto con el PP, pero imposible con Bauzá...-Es cierto. Bauzá puede ser condicionante para el pacto. El ha encabezado las políticas del PP esta legislatura y las representa en una medida muy grande. Bauzá ha desarrollado políticas que no podemos compartir. No podemos estar en un Govern que desarrolle las políticas de Bauzá.
-¿Hay tensiones internas en el PI? ¿Hay problema de liderazgo?- El liderazgo y las ideas del PI están perfectamente definidas. Elegimos una determinada estructura y definimos las ideas de funcionamiento y esta línea continua adelante.
-Pero han habido tensiones con el vicepresidente Antoni Pastor...-Más allá de lo que es normal en política, no ha pasado nada. Yo destacaría que el proyecto avanza. Las personas tienen relevancia,pero son secundarias respecto al proyecto. Es en virtud de este progrma que se ha de decidir el papel más o menos relevante que han de jugar las personas. Y quiero subrayar que Jaume Font es un magnífico líder.
-¿Por qué el PI tiene mucha más fuerza en la Part Forana que en Palma?-El partido está mucho más asentado en la Part Forana que en Palma. Somos una formación nueva, pero no podemos negar que nacemos de la confluencia de Convergència per les Illes, de la Lliga Regionalista y de grupos de independientes. Naturalmente, estos antecedentes tenían mucho más peso a la Part Forana que a Palma. Es mucho más fácil para nosotros avanzar en la Part Forana que en Palma, donde también estamos bien encaminados. En la capital hemos hecho un trabajo de barriada y de hablar con gente relevante que también podría poderse en primera línea.
-¿Cree que los mensajes que han de lanzar en Palma han de ser un poco diferentes de los de la Part Forana?-No creo que tenga que ser muy diferente. Defendemos nuestras ideas dónde sea. El discurso se puede modular, pero no cambiar. Lo que es más difícil de Palma no son los mensajes sino la estructuración. En Palma la gente no se conoce entre ella. Es más difícil. Y nosotros somos un partido de proximidad que no sale por televisión.
-Sin embargo, el PP tiene una gran fuerza en Palma...-Tengo la sensación de que el PP es más sólido en Palma que en la Part Fornana. Las políticas antimallorquinas de Bauzá y su Govern han creado mucho más rechazo en la Part Forana.
-¿Cómo ve a la izquierda balear?
-Tiene un problema de atomización. Es cierto que Més ha hecho un gran esfuerzo de incorporar dentro de un mismo paraguas a diferentes sensibilidades y grupos. Pero el panorama está dividido. Més ha hecho este esfuerzo pero ha surgido
Podem, que ha producido una reubicación de fuerzas.
-¿Entrará Podem en el Parlament?-Lo doy por hecho.
-Podría generar una correlación de fuerzas casi ingobernable...-La Cámara podría quedar muy fragmentada, con un PSIB-PSOE muy debilitado y
Podem encarnando una tendencia ascendente. La incógnita es EU, que está muy afectada por
Podem.
-¿Puede afectar a Balears la dinámica soberanista catalana?-Hemos de intentar evitar el espejismo catalán. Hay determinados sectores que tienen una tendencia excesiva a mirarse en este espejismo. Balears y Catalunya son dos realidades políticas diferentes por mucho que compartamos una lengua común. A partir de aquí cada realidad política tiene su propia dinámica y particularidades. No trasladaría en absoluto la situación de una comunidad a la otra. Nuestro mensaje está hecho en clave balear.
-Pero en Balears el gran caballo de batalla de esta legislatura ha sido la lengua propia. Y eso en plena crisis económica...-Lo tenemos constatado en las reuniones que realizamos en diferentes pueblos. La gente nos habla y nos pregunta sobre la cuestión lingüística.En un momento de crisis parece lógico que nos hablasen mucho más de economía, del paro, de turismo. Pero lo hacen sobre la lengua. Hay que pensar que en esta legislatura de Bauzá se ha perdido el sentido común y el sentido de la proporción y el consenso. Está claro que las cosas en materia lingüística tienen que hacerse con mucho más sentido común. Pero sin olvidar que hemos de incorporar el conocimiento del inglés, que es fundamental en el mundo actual.
-¿A qué aspiraría usted personalmente caso de que el PI gobernase?-Depende. Lo digo sinceramente: estoy a disposición del partido. En función de que pueda ser útil saben que estaré en mi puesto y lo he demostrado. Cuando tuvimos que elegir presidente del PI ya tenía que hacer un paso atrás para que el número uno fuese Jaume Font y lo hice con el máximo de generosidad que he sabido. No ha habido ningún problema. He remado y he ayudado todo lo que he podido. Tengo mi trabajo al margen de la política. Me gano la vida. En este proyecto hemos trabajado mucho sin ser políticos profesionales,
-Es evidente que hay una necesidad de centro nacionalista y regionalista...Se hundió UM pero ustedes han vuelto a levantar el espacio...-Estoy convencido que Balears necesita un partido centrado en la defensa de sus intereses, centrista y que huya de la cultura del no. Los baleares tienen esta mentalidad.
-¿Hace falta un mensaje del PI para los castellanoparlantes?-Si no la lengua, pueden compartir perfectamente el objetivo de mejorar la financiación autonómica. Llevamos tiempo relacionando la financiación con el nacionalismo y al nacionalismo con la gente catalanoparlante. Como si no tener escuelas, o no tener hospitales, o no tener ayudas de dependencia afectase sólo a los catalanoparlantes. No es así. Nos dirigimos a todos. Muchos castellanoparlantes entienden perfectamente la injusticia que padece Balears.
-Pero la gran mayoria de sus mil militantes es gente mallorquina tradicional de toda la vida...-Sí, pero por el factor de la proximidad, porque para nosotros es mucho más fácil llegar a estos ciudadanos. Con los instrumentos con los que contamos es normal que tengamos a esta gente más cerca que a los que nunca se han aproximado a un partido nacionalista o regionalista. Pero si explican las ideas, vemos que los problemas nos afectan a todos por igual. Si las prospecciones petrolíferas arruinan el turismo, nos arruinan a todos, hables la lengua que hables. Y en el caso de las prospecciones es evidente que hay dos clases de partidos: los que están sometidos a la disciplina de Madrid y los que no lo están. Los que dependen de Madrid han de agachar la cabeza cuando se lo exigen.