La ONG Oxfam ha alquilado la casa en la que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, vivió cuando era un niño en el barrio neoyorquino de Queens para alojar a refugiados durante la Asamblea General de la ONU.
El objetivo de OXFAM es mandar un mensaje inequívoco a los dirigentes mundiales: "los refugiados son bienvenidos", dijo la organización en un comunicado difundido este lunes.