El caso Chori Castro

Todo el mundo era consciente de la apuesta arriesgadísima de la directiva del club bermellón en el mercado de invierno de la temporada pasada cuando decidió apostar por el fichaje de Aki en detrimento del Chori Castro.

Las declaraciones de Llorenç Serra Ferrer al afirmar que el uruguayo ya no era un jugador decisivo causaron un impacto brutal en la afición aunque quedaron atenuadas por las expectativas que jalonaban la llegada del jugador nipón. Más aún, nadie se explicaba cómo se devaluaba a coste cero el máximo activo del Real Mallorca, y precisamente en una coyuntura económica no muy boyante, por emplear una expresión diplomática. Obviamente el craso error, sin duda bienintencionado, ha provocado una situación insólita ya que cada gol del Chori le sirva para aumentar su caché y pueda marcharse de rositas.

Las últimas noticias apuntan a que la directiva va a realizar un esfuerzo para retener al jugador más cotizado de la plantilla, todo ello anudado a la buena predisposición del jugador y al cariño recíproco con la hinchada. Todo está en manos de Paco Casal, crucemos los dedos y a rezar. Eso si, mientras discuten que procure marcar muchos goles, harán falta.