Pocos podían adivinar que en la guerra ya a cara descubierta en el Mallorca entre el grupo de Serra Ferrer y sus socios por una parte y el director general Pedro Terrasa y su potentísimo grupo mediático como aliado por otra, aparecería un tercero en discordia como así ha ocurrido con el profesor y académico teutón Utz Claassen. La batería de 91 preguntas que pretende que le contesten sus compañeros de junta adelanta una declaración de guerra similar a lo ocurrido tras el ataque del ejército nipón a Pearl Harbor el 7 de Diciembre de 1941.
El directivo alemán, si se analizan las preguntas que parecen propias de un temario de oposición, parece ahora que pretende cuestionar del Consejo de Administración hasta la marca de agua embotellada que se sirve en las reuniones. Sin duda que habrá que estar preparados para la reacción del grupo de Serra, pero ahora la pregunta más importante y que de momento pasa desapercibida es la política de alianzas que buscará el inversionista alemán. Habrá que ver si pacta con Terrasa o si piensa ir por libre.
La primera opción es difícil ya que el director general no se ha quejado del precio que pagó por sus acciones a Alemany, y en cambio si se queja y mucho el empresario germano, aunque en este club y a efectos de salir en la foto todo es posible.