El Hospital Vall d'Hebron de Barcelona ha separado con éxito a dos siamesas que nacieron unidas por el abdomen y que compartían el hígado, en el marco de una operación delicada que duró cerca de siete horas.
Las pequeñas, Núria y Marta, pudieron crecer y alimentarse con normalidad hasta que alcanzaron los 12 kilos de peso, y la intervención era necesaria para reducir complicaciones futuras.
En la operación, en que participaron cirujanos pediátricos y plásticos, anestesistas, obstetras, neonatólogos, radiólogos y enfermeras y auxiliares, se hizo una separación de vísceras y del hígado de las pequeñas, que ahora hacen vida normal.