La organización ecologista Oceana ha criticado que, según un informe científico, entre los años 2008 y 2012, las praderas de posidonia se han reducido más de un 20% en la zona norte de Formentera.
Los ecologistas han lamentado que este retroceso ha sido causado por decenas de embarcaciones que fondean ilegalmente sobre la posidonia y arrancan las plantas con el ancla. Oceana ha recordado que la posidonia es un hábitat protegido por la Unión Europea y han destacado que la pradera del Parque Natural de Ses Salines, donde se ha realizado el estudio, fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1999.
El negativo informe ha sido elaborado por siete biólogos marinos de la consultora ambiental OceanSnell, que han analizado la situación de las praderas situadas entre Punta Pedrera y S'Espalmador, en una zona incluida en el Parque Natural de Ses Salines y en un área declarada LIC, Lugar de Importancia Comunitaria, en Ses Salines d'Eivissa i Formentera.
El estudio compara el estado de la pradera en noviembre de 2012 con datos recogidos en 2008, utilizando los mismos métodos de investigación.
Oceana ha destacado que, en este tiempo, la pradera se ha reducido en un 16%, en la zona que mejor ha resistido, y en un 44%, en la más castigada. Los autores del estudio han afirmado que, sin lugar a dudas, "la elevada presencia de mata muerta de posidonia y el descenso de la cobertura en todas las zonas, es consecuencia directa del fondeo de embarcaciones sobre las praderas".
Los expertos han basado esta afirmación "en la presencia de gran cantidad de marcas de garreo de anclas de embarcaciones, los bloques de pradera arrancados, la distribución en manchas y localización de las zonas de mata muerta, así como en el elevado número de embarcaciones que fondean en estos lugares durante la época estival".
Los instrumentos de investigación localizaron 209 marcas de garreo sobre la posidonia, alguna de ellas de hasta 344 metros de longitud, y se estima que el impacto directo de esas marcas es de 11.000 m2.
Desde Oceana, han explicado que el objetivo de su organización "no es el de entrar en polémicas con el Govern, sino colaborar para que se solucionen los problemas con propuestas en positivo".
Por ello, han instado al conseller de Agricultura, Territorio y Medio Ambiente, Gabriel Company, a poner en marcha urgentemente el proceso de instalación de boyas ecológicas, "ya que son el único modo posible de permitir la presencia de un número controlado de embarcaciones de todas las esloras sin dañar las praderas", han insistido.