Benedicto XVI ha prometido obediencia "incondicional" al próximo Pontífice, en su encuentro de despedida de los cardenales residentes en Roma y los que ya han llegado de diferentes partes del mundo, a los que ha pedido que el Colegio Cardenalicio trabaje como una orquesta armoniosa.
"Hemos de dar gracias al Señor que nos ha hecho crecer en la comunión y pedirle que nos ayude a seguir creciendo con esta unidad profunda de modo que el Colegio de Cardenales sea como una orquesta donde las diversidades de la Iglesia Universal confluyan siempre con la armonía superior y acorde", ha recalcado.