Durante la ceremonia de inaguración de la rotonda, que ha tenido un coste de 662.100 euros, Llorenç Galmés ha explicado que las obras podrían comenzar a principios del verano, y se espera que el nuevo vial esté disponible antes de que finalice el año.
La intervención supondrá la creación de un paseo mixto de medio kilómetro, diseñado para peatones y ciclistas, a lo largo del lado derecho de la carretera Ma-2022.
Para poder instalarlo se demolerá la cuneta actual, reemplazándola e instalando un colector subterráneo de drenaje. Además, se instalará iluminación con balizas y luces LED, junto con canalizaciones subterráneas de reserva.
El proyecto incluirá también la creación de un parterre longitudinal destinado a la plantación de árboles y arbustos, con el objetivo de integrar la construcción en el entorno. Simultáneamente, se llevarán a cabo mejoras en la cuneta triangular actual, revestida de hormigón, que será sustituida por una versión rectangular con mayor capacidad hidráulica.
El relleno de grava y la incorporación de un tubo de drenaje mejorarán la conducción del agua, especialmente en caso de lluvias torrenciales.
En relación con la rotonda recién inaugurada, Galmés ha subrayado que se trata de una actuación "prioritaria" para la administración insular, ya que la intersección en forma de 'T' que existía entre la carretera Alaró-Consell y el camí vell d'Orient se consideraba insegura, y la falta de visibilidad generaba situaciones peligrosas. Por su parte, la rotonda tiene como objetivo mejorar la seguridad vial y eliminar un punto conflictivo en la zona.