La ministra de Sanidad Ana Mato ha cometido el tremendo crimen lingüístico de condenar “la violencia en el entorno familiar” para definir el asesinato de una mujer en Almería a manos de su marido y se han desatado las iras del infierno y con ellas los talibanes de la lengua, que haberlos los hay en todos los idiomas, por tamaña osadía de la ministra.
¿Cómo osa decir violencia en el entorno familiar y no violencia de género? Horror. El PP ha traído de nuevo la cultura machista a este país, hemos retrocedido 20 años y se ha confundido a la población.
Le recuerdo a todos los que se han rasgado las vestiduras que la Real Academia de la Lengua, esa que no debe saber absolutamente nada de castellano, dijo en su día que “violencia de género” era un término totalmente incorrecto y proponía en su lugar “violencia doméstica, pero Zapatero y sus ministras, muy ilustradas ellas, se negaron a escuchar a la RAE y optaron por esa violencia de género que lingüísticamente es incorrecta, porque confunde el género con el sexo.