Según han informado fuentes cercanas a los hechos, otros tres arrestados han quedado en libertad con cargos y dos más siguen ingresados en el hospital bajo custodia policial.
Cabe recordar que los hechos ocurrieron el pasado martes de madrugada, cuando, desde el Hospital Son Llàtzer, en Palma, se recibió una llamada que informaba de que se estaba prestando atención médica a cuatro personas con lesiones producidas por arma blanca. Posteriormente, se recibió otra llamada, en este caso procedente del Hospital Son Espases, también en Palma, que alertaba del ingreso de otras dos personas que presentaban, igualmente, diversas heridas.
Varias patrullas de Seguridad Ciudadana se desplazaron a ambos centros hospitalarios y averiguaron que todos los heridos estaban relacionados con una misma pelea. Las versiones sobre el conflicto eran distintas: algunos declarantes apuntanban que los hechos habían tenido lugar a raíz del casamiento de una menor, y otros señalaban un desacuerdo en una pelea de gallos.
Además, también se indicó que el enfrentamiento se había producido en un descampado de la barriada palmesana de Son Ferriol.
Con arreglo a las investigaciones, los agentes comprobaron que los heridos que permanecían en el hospital, algunos de ellos con varias heridas y en estado grave, formaban parte de dos grupos diferentes, cuatro por un lado y dos por el otro, procediendo a la detención de estas seis personas y trasladando las diligencias al Grupo de Homicidios de la Policía Nacional.
Este Cuerpo policial se encargó de detener a una séptima persona, relacionada con el grupo de cuatro, comprobando que los hechos se habían producido en una finca situada en el municipio mallorquín de Sant Joan.
En este emplazamiento, el pasado lunes, el grupo de cinco personas, armadas con escopetas, se adentró en la casa para robar marihuana de una plantación perteneciente a un clan. Esta accion se conoce como 'vuelco' en el argot policial.
Estos cinco asaltantes consiguieron reducir a dos personas que cuidaban de la plantación y empezaron a recolectar la marihuana. Sin embargo, en las dependencias se habían habilitado cámaras de seguridad que estaban conectadas en directo con los responsables de la plantación, quienes rápidamente se personaron hasta el lugar, armados con cuchillos y palos.
En ese momento se produjo una pelea entre los dos miembros del grupo, de tal manera que las personas vinculadas a la plantación agredieron con armas blancas, presuntamente, a los intrusos, que fueron víctimas de varias puñaladas. Uno de ellos, además, recibió un golpe en la cabeza con un instrumento contuso, supuestamente un hacha.
Así como pudieron, los cinco escaparon del lugar a bordo del vehículo en el que habían llegado. Sin embargo, el conductor, dada la gravedad de las lesiones y el estado de algunos heridos, optó por trasladarlos a Son Llàtzer. Por su parte, las dos personas que guardaban la plantación fueron acompañadas por sus allegados hasta Son Espases.
Los agentes llevaron a cabo una entrada y registro y comprobaron la existencia de una plantación de marihuana en la finca, con 700 plantas, por lo que procedieron a desmantelar la instalación e intervenir toda la droga. También localizaron una pistola con silenciador que estaba oculta en una caseta de la finca, así como una navaja de grandes dimensiones.
El Grupo de Homicidios, ante los hallazgos y evidencias que se habían obtenido durante la investigación, informó a los detenidos de los motivos del arresto: a cinco de ellos como presuntos autores de un delito de robo con violencia (concretamente, los que entraron en la finca a robar la marihuana) y a los otros dos como presuntos autores de tenencia ilícita de armas, cuatro tentativas de homicidio y tráfico de drogas.
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