Si usted no posee la nacionalidad canadiense, sepa que no podrá comprar una vivienda en el país de la hoja de arce hasta dentro de, al menos, dos años. La falta de inmuebles y la subida constante de los precios ha provocado una crisis que esta nueva medida pretende hacer frente.
"Las casas son para las personas, no para los inversores", declaró el presidente Trudeau en alusión a las numerosas operaciones de especulación a manos de corporaciones e inversores extranjeros llevadas a cabo en Canadá desde el inicio de la pandemia. No en vano, compradores extranjeros adquirieron durante aquellos meses numerosas propiedades como inversión.
La medida, una de las promesas electorales de Trudeau en su última campaña a las elecciones de 2019, no afecta a los residentes permanentes del país. Además, se contemplan excepciones con estudiantes extranjeros, solicitantes de asilo y titulares de permiso laboral.
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