Según el escrito del fiscal, los hechos se remontan a una noche de junio de 2019, cuando un amigo de los dos acusados se subió al escenario de la discoteca y el portero le invitó a bajarse. En ese momento, se inició una discusión verbal y los dos acusados comenzaron a darle puñetazos y patadas al portero hasta que cayó al suelo. De acuerdo con la Fiscalía, los procesados proferían expresiones en alemán como "jódete negro" o "negro de mierda".
Como consecuencia de los hechos anteriormente descritos, la víctima sufrió diversas lesiones que le han dejado secuelas y le obligaron a someterse a una intervención quirúrgica. Además, según el fiscal, la agresión sufrida por el perjudicado le ha supuesto una incapacidad total para su trabajo habitual.
Por todo ello, la Fiscalía acusa a los dos jóvenes de un presunto delito de lesiones con la circunstancia agravante de cometer el hecho por motivos racistas.
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