El motor ya está en marcha. Mallorca arranca la temporada turística, de Baleares y España, con un plan piloto que traerá alrededor de 1.200 turistas alemanes a la isla en siete vuelos -y otros 200 a Ibiza- a lo largo de esta semana. Una experiencia clave para poner a prueba los protocolos e infraestructuras turísticas y sanitarias antes de que el estado de alarma expire y abran las fronteras del país, con la consiguiente recuperación del turismo nacional e internacional. inicialmente esperaba movilizar hasta un máximo de 10.900 viajeros en toda la quincena, pero que se ha visto acortado con la apertura generalizada de fronteras del espacio Schengen en España.
El primer contingente ha llegado este lunes en dos aviones procedentes de Düsseldorf y Frankfort. Los visitantes, recibidos por decenas de medios de comunicación españoles y alemanes en el aeropuerto y trabajadores y curiosos en el Riu Concordia -uno de los dos establecimientos abiertos este lunes en Platja de Palma- han mostrado alegría por "estar de vuelta" a su destino favorito. "Adoramos Mallorca, teníamos muchas ganas de volver", indicaba a la prensa Jürgen, uno de los 189 pasajeros del primer vuelo. "Hay miedo al coronavirus pero Mallorca tiene buena imagen. En nuestro país no se percibe igual el resto de España que esta isla", subrayaba antes de montarse al autobús que les llevaría al hotel.
Una vez en el interior del establecimiento, los turistas han puesto en práctica todas las medidas sanitarias especificadas para el sector: entrada al hotel con distancia de seguridad, toma de temperatura mediante cámaras termográficas que activan las alarmas si registran algún usuario con más de 37 grados, gel hidroalcohólico a cada paso, mesas separadas en la terraza y piscina con un control extremo de limpieza y desinfección constante, entre otros.
Porque del cumplimiento de las normas y la responsabilidad individual -como han recordado insistentemente las autoridades baleares durante el acto- va mucho del futuro de la comunidad autónoma. Toda Europa, especialmente Alemania, tiene la mirada puesta en las islas y los resultados de esta semana serán determinantes para las próximas reservas.
"Tenemos la sensación de que se cuidan mucho las formas y nosotros vamos a contribuir porque queremos unas vacaciones a gusto, somos los primeros interesados en cumplir", afirmaba a mallorcadiario.com uno de los visitantes que, tras dejar las maletas en la habitación y cambiarse de ropa, se relajaba en la terraza del hotel junto a su pareja. "Ya habíamos estado antes pero esta ocasión será especial, no sólo por el contexto sanitario sino también por las condiciones de la isla: jamás la habíamos visto tan tranquila", opinaba otro cliente alemán. La isla de la calma, ahora más que nunca.
De momento, el plan se ha vendido bajo la premisa de "Mallorca, destino seguro para la vuelta de los turistas". El consejero delegado de TUI, Sebastian Ebel, ha hecho hincapié en las ganas de venir a Mallorca que se respiran en Alemania -"esta isla seguirá siendo destino preferente para los alemanes"- y se ha mostrado "optimista" ante los próximos meses. No descarta, de hecho, una elevada demanda de reservas en los próximos días. "Quizá algunos mercados como Gran Bretaña no estén en condiciones pero de Europa central espero buenas reservas", ha dicho.
Además, ha resaltado la capacidad de Tui de flexibilizar la oferta en función de la demanda a corto plazo. "Estoy seguro que la programación de esta semana no tendrá nada que ver con la de la semana próxima".
Por su parte, el Govern, Consell y Ajuntament de Palma han expresado su deseo que la temporada sea lo más larga posible. La presidenta del Ejevutivo balear, Francina Armengol, ha expresado su deseo de llevarla incluso a finales de año. "Sabemos que hemos perdido unos meses fundamentales para Baleares pero estamos en junio y estamos abriendo. Ahora vamos a julio, vamos a agosto y vamos a diciembre, si es posible", ha aseverado en una rueda de prensa multitudinaria ante periodistas nacionales y alemanes.
"Porque cerramos los primeros y hemos sido muy responsables, ahora abrimos los primeros", ha declarado antes de pedir "máxima colaboración a los turistas que aterricen en las islas, durante la fase piloto y etapas posteriores. "Nos jugamos mucho", recordaba. Efecto llamada, tanto para lo bueno como para lo malo.
Desde el Consell de Mallorca, el mensaje se centra en la ubicación geográfica de las islas como factor determinante ante países competidores: "Saludos desde el centro del Mediterráneo", comenzaba su discurso la presidenta de la institución Catalina Cladera. "Mallorca está preparada para acoger turismo. Es la Mallorca de siempre, e incluso más bonita y segura, si cabe, y mantiene todos sus encantos intactos".
Por su parte, el alcalde de Palma, José Hila, se congratulaba de la elección de Palma como epicentro del arranque del plan y lanzaba un mensaje optimista para los próximos meses. "Palma es líder turístico mundial y ahora va a volver a demostrar que tiene un sector profesional capaz de afrontar cualquier revés", afirmaba.
Y más allá del plan piloto, la mirada ahora está puesta en el próximo domingo 21 de junio, con el fin del estado de alarma y la apertura de fronteras, que se traduce en el regreso de turistas españoles y extranjeros.
Desde la Federación Hotelera de Mallorca valoran positivamente la decisión del Gobierno central ya que "hacer coincidir los dos mercados, el nacional e internacional es muy importante para el destino", afirma la presidenta, Maria Frontera. "Los mercados emisores esperaban ansiosos la noticia y esperemos que con ello, de una vez por todas, se reactive la industria turística, absolutamente necesaria para España".
Por su parte, Gabriel Llobera de la Asociación de Cadenas Hoteleras, agradece la decisión de avanzar la apertura de fronteras a la semana que viene. "Será muy positivo para abrir de manera generalizada y con normalidad el resto de establecimientos hoteleros".