La realización de pruebas para detectar los casos de coronavirus se ha demostrado una muy eficaz forma de contener la pandemia y reducir la mortalidad, ya que permite actuar con antelación en los casos de pacientes que pertenezcan a grupos de riesgo por su edad y por la existencia de patologías previas, como la hipertensión, diebetes y enfermedades cardiovasculares.
Para realizar un mayor número de pruebas se creó lo que ha venido a denominarse unidades Covid-exprés. Se trata de unos dispositivos especiales para la recogida rápida de muestras y hacer pruebas para detectar el coronavirus. Gestionadas por la Gerencia de Atención Primaria de Mallorca, estas unidades COVID-exprés están dirigidas a los profesionales sanitarios y sociosanitarios, al personal de servicios especiales (Policía Nacional, Guardia Civil, policías locales, fuerzas armadas, etc.) y a los colectivos más vulnerables dada su situación de fragilidad ante el coronavirus.
La Central de Coordinación Covid-19 de Atención Primaria de Mallorca coordina y revisa las listas de personas que deben ser atendidas por una COVID-exprés. Si cumplen los requisitos establecidos por el Ministerio de Sanidad se pone en marcha el dispositivo.
Se envía un SMS de cita a cada persona indicando el día, la hora y el lugar donde se le hará la prueba para detectar el coronavirus. Un profesional sanitario equipado con la protección adecuada le hace una entrevista, recoge las muestras y le entrega información útil. A las 24-48 horas se le confirma si el resultado de la prueba es positivo o no.
Según un informe del Servicio de Epidemiología de la Conselleria de Salut i Consum, hasta el lunes 6 de abril se habrían realizado 8.762 pruebas PCR en los laboratorios de microbiología del Hospital Son Espases, Son Llàtzer, Can Misses (Ibiza) i Mateu Orfila (Menorca). De ellas, 1.359 (el 16%) habrían dado resultado positivo y las restantes 7.403 pruebas (el 84%) serían negativas en Covid-19.
En un primer momento se priorizó la realización de pruebas a pacientes hospitalizados o con criterios de ingreso hospitalario y a los profesionales sanitarios y sociosanitarios o de otros servicios esenciales que presentasen síntomas de padecer infección por Covid-19.
Ahora, el Gobierno de España ha determinado que los test rápidos adquiridos solo se van a realizar a pacientes que estén hospitalizados y sospechosos de padecer Covid-19, sin PCR o con PCR negativas con varios días de evolución. En ese caso, si es positivo se confirmará el diagnóstico y si es negativo, se realizará una PCR.
Fuera de los hospitales la prioridad a la hora de realizar los test rápidos estará en las residencias de ancianos y en centros socio-sanitarios a pacientes sintomáticos que lleven varios días enfermos. Si en el centro se ha detectado más de un caso con síntomas de Covid-19 no será necesario obtener resultado positivo en todas las personas sospechosas. Así, se se obtuviera al menos una prueba positiva, se considerará que hay un brote y se tratará y aislará a los pacientes con síntomas y se aislará al resto de residentes para pasar la cuarentena.
Tanto los sindicatos de profesionales sanitarios como los de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad reclaman que se practiquen las pruebas a todos sus integrantes. Según confirmó este sábado el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, aproximadamente 2.700 policías nacionales y guardias civiles han resultado afectados por el Covid-19 en todo el país.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha confirmado que se está comenzando a distribuir otro millón de test rápidos a las CCAA, que serán utilizados, como la partida anterior, en el cribado rápido en entornos de alta prevalencia de Covid-19, como residencias de ancianos y hospitales.
También ha avanzado la creación de una única red de testeo, para garantizar que todos los diagnósticos que se realicen estén sujeto a las indicaciones e instrucciones de las autoridades sanitarias de las comunidades autónomas. "Es probable que hoy mismo o mañana esté lista esta orden", ha comentado. El objetivo es "garantizar la equidad" y que se teste a "quienes deben ser testados en primer lugar de acuerdo a criterios sanitario y epidemiológicos, con independencia de otras características".