La ministra de Educación, Isabel Celaá, confía en que los alumnos puedan volver al colegio en mayo o incluso junio. Es la previsión de la titular del ramo, doce días después de decretarse el estado de alarma que ha confinado a toda la población en sus casas y que ha suspendido la práctica totalidad de las actividades ciudadanas, incluída la asistencia a los colegios.
El asunto se debatirá con los responsables de Educación de las comunidades autónomas el próximo 11 de abril -coincidiendo con el fin de la primera prórroga del estado de alarma- en una reunión cuyo resultado es tan incierto como grandes son las dudas acerca de todo lo que pueda pasar en los próximos días en relación a la crisis sanitaria y sus consecuencias.
Celaá apuesta porque los alumnos puedan volver a las aulas en junio, "al menos" durante quince días para hacer repaso y afrontar una evaluación final. Sin embargo, las dudas sobre el actual curso escolar son muchas. Para la selectividad, ya hay fechas. En Baleares, Educació y la UIB han acordado que las pruebas se realizarán los días 7, 8 y 9 de julio, con contenidos que los alumnos hayan cursado, con la intención de que los alumnos que se tienen que presentar a las pruebas se vean perjudicados "el mínimo posible".
Para el resto de niveles, sin embargo, la incertidumbre que sufren miles de familias es considerable. Al trastorno que supone el confinamiento domiciliario, se suma el esfuerzo para que los más jóvenes puedan seguir con sus clases y no perder el curso. Los alumnos siguen las asignaturas a través de mails, plataformas del colegio, videollamadas, clases virtuales... Las autoridades docentes insisten en la necesidad de no perder el hábito de estudiar, pero el horizonte a la vista es ciertamente indefinido y será necesario actuar con celeridad y mayor planificación si el confinamiento se sigue prorrogando durante semanas.