Móviles y salud
lunes 09 de marzo de 2015, 19:20h
En el reciente Mobile World Congress de Barcelona ha seguido creciendo, respecto de ediciones anteriores, el número de actividades, conferencias, seminarios y expositores dedicados a las aplicaciones para la salud y la asistencia sanitaria.
Se prevé un aumento exponencial en el desarrollo de nuevas apps para teléfonos inteligentes en el área de la salud en los próximos años. Todos los expertos señalan que estas tecnologías permitirán que los ciudadanos puedan tener control sobre su salud y tomar decisiones en coordinación con su médico y sus proveedores de servicios sanitarios.
Existen ya plataformas webs y de apps para móviles en diversos ámbitos de salud, especialmente para enfermedades crónicas, como la diabetes, la enfermedad celíaca o el autismo y también para el cuidado preventivo, como seguimiento de dietas, control del desarrollo de los niños o autoevluación de la capacidad auditiva. También existen aplicaciones de ayuda a personas con ciertas minusvalías, como una que informa a quienes tienen problemas de movilidad reducida de los espacios y lugares accesibles, incluida su geolocalización. También existe la posibilidad de disponer de los datos de la historia clínica personal en el móvil y alguna comunidad autónoma española ya tiene este servicio a disposición de sus ciudadanos.
En el congreso se ha presentado una aplicación especialmente interesante para enfermedades crónicas, que permite la autogestión por parte de los pacientes de sus procesos concretos y, más allá, propone la posibilidad de que cada persona controle su propio proceso natural de envejecimiento de manera activa y saludable, que es de hecho el nombre de la aplicación: “mSalud para enfermedades crónicas y un envejecimiento saludable y activo”.
También se ha presentado una aplicación que permite el seguimiento integral del embarazo por parte de la propia gestante.
El desarrollo de estas aplicaciones es imparable y permitirá el empoderamiento de pacientes y ciudadanos de su propia salud y son uno de los fundamentos de la evolución hacia la denominada medicina de las 4 P: predictiva, preventiva, participativa y personalizada.
Existen sin embargo ciertos peligros que deben ser tenidos en cuenta y solucionados adecuadamente, sobre todo en lo que hace referencia a la privacidad y a la seguridad de los datos. Sabemos, por recientes escándalos que han estallado en la prensa internacional a cuenta de la difusión de fotos íntimas de famosos, que el almacenamiento de datos en la nube no es todo lo seguro y fiable que debería. También plantea problemas la seguridad de la transmisión de datos entre dispositivos.
Los desarrolladores de aplicaciones y las autoridades deben dedicar los esfuerzos necesarios a garantizar la seguridad y privacidad de los datos. En estos momentos, parece que se avanza mucho más rápido en el desarrollo de aplicaciones que en el del diseño de protocolos de protección de la información privada.