Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Baleares en una nota de prensa, una vez en el lugar de los hechos los agentes se han entrevistado con los vecinos, quienes han asegurado que habían visto a un sospechoso tratando de manipular el portón de entrada de un edificio.
También se han referido a una especie de tornillo colocado en la puerta de acceso para impedir que se cierre, así como a un grupo de hombres que han subido "de forma sigilosa" por las escaleras y que supuestamente iban al encuentro del primero.
Al seguirles hasta uno de los pisos superiores, siempre según por lo manifestado por los vecinos, han encontrado una puerta entreabierta y a uno de los sospechosos manipulando la cerradura con un destornillador, con la intención de cambiar la misma.
Con toda esa información, los agentes se han dirigido a la vivienda ocupada, cuya puerta han encontrado cerrada y con daños. En el interior del domicilio han localizado bolsas con pertenencias de los sospechosos y un colchón en el suelo.
En un primer momento, los cuatro jóvenes, todos ellos de nacionalidad argelina, han manifestado que acababan de adquirir el inmueble, aunque luego han cambiado el relato y han asumido que su intención era empezar a vivir allí.
Según las pesquisas llevadas a cabo, los agentes han podido corroborar que los sospechosos habían cambiado la cerradura de la puerta y que tenían llaves de la nueva. Por todo ello han sido detenidos como supuestos autores de un delito de usurpación de inmueble y daños.