El COIAL apuesta por una Llei Agrària de Balears que fomente en el sector primario la multifuncionalidad, implemente los contratos territoriales, simplifique todos los procedimientos administrativos y preserve el carácter rural del territorio agrario de las Islas. Toda esta serie de propuestas se recogen en un documento, que ha contado con la colaboración de expertos en varias disciplinas, y que el COIAL ha presentado a la Conselleria d’Agricultura, Pesca i Medi Natural, para que sean tenidas en cuenta en la redacción de la futura Llei Agrària de les Illes Balears.
El Col·legi Oficial d’Enginyers Agrònoms de Llevant (COIAL) ha reforzado su compromiso con el futuro del sector agrario balear mediante la presentación de un exhaustivo documento con sus propuestas para la nueva Llei Agrària de les Illes Balears. El documento, entregado a la Conselleria de Agricultura, Pesca i Medi Natural, busca establecer un marco normativo que garantice la sostenibilidad y viabilidad del medio rural, respondiendo a la fase de consulta pública del anteproyecto de ley. Estas propuestas, elaboradas con la colaboración de expertos en distintas disciplinas, reflejan un enfoque integral para revitalizar el sector agrario en el archipiélago.
Reforzando el futuro del campo balear
El sector agrario en las islas ha perdido relevancia durante las últimas décadas, en gran medida debido a la presión demográfica y una estructura de propiedad agraria excesivamente fragmentada. Estos factores han desplazado a la agricultura de su papel estratégico y han llevado a un abandono creciente de las explotaciones. Según el COIAL, esta tendencia no solo compromete la sostenibilidad económica, sino que también acarrea graves consecuencias ambientales y culturales. El abandono de tierras genera continuos forestales inflamables y reduce el valor patrimonial del territorio, erosionando el carácter rural que define a las Baleares.
Conscientes de este desafío, los ingenieros agrónomos del COIAL han formulado una serie de medidas que pretenden devolver al sector agrario balear la relevancia que merece, fomentando su capacidad multifuncional y potenciando su papel como elemento clave en la preservación del entorno. “El objetivo es proporcionar un marco normativo que permita a los agricultores desplegar todo su potencial, asegurando que la renta generada por las actividades que puedan desplegar en sus explotaciones sea competitiva frente a otros usos del suelo,” subraya Felip Gelabert, delegado del COIAL en las Illes Balears.
Propuestas para revitalizar el campo balear
Entre las propuestas del COIAL destaca el fomento de la multifuncionalidad agraria, entendida como la capacidad de las explotaciones para diversificar sus fuentes de ingresos y rentabilizar las externalidades positivas que genera la agricultura. Para ello, se proponen incentivos que permitan a los agricultores desarrollar actividades complementarias. La simplificación de trámites y la eliminación de trabas burocráticas serán esenciales para que estas actividades sean realmente viables y atractivas para los agricultores.
Asimismo, el COIAL aboga por la implementación de contratos territoriales que compensen el impacto de actividades no agrarias en las áreas rurales. Estos contratos, ampliamente recomendados en las políticas europeas de desarrollo rural, permitirían equilibrar los beneficios económicos, sociales y ambientales, facilitando la coexistencia de distintas actividades en el territorio. Según el COIAL, esta medida podría ser clave para revitalizar el campo balear, asegurando la sostenibilidad de las explotaciones y el mantenimiento de los servicios ambientales que proporciona la agricultura.
Claridad normativa y preservación del carácter rural
La institución también subraya la necesidad de mejorar la claridad normativa y simplificar los procedimientos administrativos para fomentar la inversión en el sector agrario. En este sentido, el COIAL considera imprescindible que la nueva ley incluya un artículo con definiciones exhaustivas que aporten seguridad jurídica y clarifiquen los usos permitidos en suelo rústico. Esto no solo favorecería la actividad agraria, sino que también facilitaría la integración de actividades complementarias, creando un entorno normativo más atractivo para los jóvenes que deseen incorporarse al sector.
Además, el COIAL hace hincapié en la necesidad de preservar el carácter rural del territorio balear. Para ello, las políticas agrarias deben priorizar la conservación de las tierras agrícolas y evitar la conversión de estas en usos residenciales desvinculados de la actividad agraria y rural. Mantener el uso agrario del suelo es fundamental para proteger el paisaje, preservar el patrimonio cultural y asegurar que la actividad agrícola siga siendo una opción viable en el futuro.
Inspiración en las políticas europeas
Las recomendaciones del COIAL se sustentan en un análisis detallado de las políticas europeas de desarrollo rural, tomando como referencia la experiencia acumulada a lo largo de distintos periodos de la Política Agrícola Común (PAC). Desde el fortalecimiento de la competitividad y multifuncionalidad agraria en el periodo 2007-2013, hasta la promoción de la sostenibilidad, innovación y resiliencia durante 2014-2020, las lecciones aprendidas han sido fundamentales para elaborar un enfoque adaptado a las necesidades específicas de las Baleares.
La Visión a Largo Plazo para las Áreas Rurales de la Unión Europea hasta 2040 también ha servido de guía en la elaboración de las propuestas del COIAL, que buscan fortalecer la resiliencia del sector agrario frente al cambio climático, impulsar la digitalización y fomentar el relevo generacional. "El objetivo es adaptar las mejores prácticas europeas al contexto balear, teniendo en cuenta las particularidades del archipiélago y su necesidad de proteger el medio ambiente y garantizar la seguridad alimentaria," explica Gelabert.
Un enfoque integral y que se sostenga en el tiempo
El enfoque propuesto por el COIAL destaca por su carácter integral, considerando no solo la dimensión económica, sino también la social, ambiental y cultural del desarrollo rural. Las medidas están alineadas con la política europea de fomento del consumo local, apoyo a la juventud rural y promoción de la economía circular. En el ámbito de la digitalización, se subraya la necesidad de modernizar las explotaciones con tecnologías que optimicen el uso de recursos y mejoren la eficiencia productiva.
Gelabert ha liderado este esfuerzo con el respaldo de la Junta de Gobierno del COIAL y un equipo de especialistas en diversas áreas, enfatizando que las aportaciones del colegio no solo buscan mejorar el marco normativo, sino también promover un desarrollo rural coherente y sostenible. "El sector agrario puede y debe ser una fuente de prosperidad para las Baleares, pero para ello es fundamental contar con un marco legal que lo apoye y lo proteja," concluye.