El árbitro mallorquín Mateu Busquets Ferrer, de 30 años de edad, no olvidará jamás su primer gran partido en LaLiga, todo un derbi madrileño que ha tenido que parar debido al lanzamiento continuado de objetos desde el fondo donde se situán los aficionados colchoneros más radicales sobre el que fue un día su portero: el ahora madridista Courtois. Finalmente, el encuentro, en el que el trencilla ha cuajado un excelente actuación, se ha podido reanudar para acabar en tablas.
Tras una primera mitad marcada por los pocos riesgos asumidos por ambos bandos, y en el que 'La Araña' ha gozado de la mejor ocasión en un jugada personal, Militao ha avanzado a los blancos con un chut que ha tocado en Marcos Llorente antes de besar las mallas en el minuto 64.
Cinco más tarde, el colegiado mallorquín Busquets Ferrer se ha visto obligado a detener el juego en el Cívitas Metropolitano por el lanzamiento continuado de objetos al portero del Real Madrid y con pasado colchonero, Thibaut Courtois.
Pese a que los jugadores del Atlético y el propio técnico rojiblanco, Diego Pablo Simeone, se acercaron a la grada para calmar los ánimos y hablar con sus aficionados, algunos de ellos con el rostro cubierto, el árbitro del comité balear ha decidido parar el juego a la espera de retomarse si se daban las condiciones de seguridad necesarias para sus protagonista.
Tras una pausa de más de quince minutos, el fútbol se ha reanudado. Entonces, y cuando todo parecía indicar que los de Ancelotti se llevarían los tres puntos, ha aparecido el inicialmente suplente Correa para establecer el empate definitivo con una diana que, en un principio, había sido invalidada por fuera de juego.