El PSIB miente

Armengol ha regresado a Mallorca, para actuar como secretaria general de los socialistas de Baleares. Mitin para insultar y apedrear a los fachas de extrema derecha del PP y Vox. Por cierto, Vox tendría que agradecer a los de la izquierda que les hagan tanta publicidad gratuita. Armengol va y dice que Prohens debe acordar con Sánchez un modelo singular de financiación autonómica que, si no, es un insulto. Debe creerse que, la actual presidenta, es tan ingenua como lo fue ella, cuando le llamó Ábalos/Koldo. Sánchez no ofrece nada nuevo. Para empezar, cada comunidad tiene un tipo singular de financiación, que, se supone, debe bastar para ofrecer los mejores servicios públicos a los ciudadanos. Para eso, la norma general se reparte en función de varias variables. Eso ya lo sabemos. Lo que Sánchez quiere es perpetuarse en el poder. Es un totalitarista, dictador y caudillo, como su amigo Nicolás Maduro. Y utiliza, con mucho ingenio, la mentira de las negociaciones singulares para que los separatistas catalanes se salgan con la suya, que es tener una verdadera nación propia. Lo llevan intentando desde el rey Ataúlfo. El problema es que en la actual España las españas en minúscula son las Comunidades Autónomas. Y estas, están consagradas en la Constitución de 1978. Aprobada por el pueblo español en referéndum el 6 de diciembre. Día de fiesta también para los antiespañoles, separatistas, republicanos, comunistas y antisistemas. El problema es que hemos consentido que la política se haya convertido en una guerra civil sin armas. Se han pasado todos los límites racionales, tanto jurídicos como éticos. Solo importa el jefe y nada vale más que lo que diga el jefe. Y en estas, se lleva la palma Pedro Sánchez. Lo de los partidos minoritarios que le apoyan es otra consecuencia de la estupidez de los populares. Cuando los españoles empezaron a votar a partidos regionalistas y de poca importancia, elevaron los altares de la democracia (por eso hay que aceptarlo) a unos sujetos que lo único que han intentado es tener su propia nación a diferencia y separada de España. Para poder tener el poder y el dinero. Perpetuarse en el gobierno y gestionar el dinero público en tres fases: primero, mis amigos; segundo, mis compañeros de partido, y tercero, los amigos de mis amigos. Muchas veces se ha hablado de cambiar la ley electoral actual y copiar la francesa, denominada uninominal, que obliga a hacer dos votaciones- dos vueltas- para la elección de los representantes en el Parlamento y en la presidencia del Gobierno, Antes, en España solo había un centro y una derecha, el resto era las distintas formaciones de la izquierda, comunistas, antisistemas, nacionalistas, separatistas y demás hierbas. Los socialistas ganaron sus primeras elecciones en diciembre de 1982. No les votaron los catalanes de Convergència i Unió, ni la derecha del PNV, ni los republicanos de ERC. En contra Alianza Popular y la UCD. En ese momento quedó claro que se debían crear partidillos de un lado y del otro, para que con pocos votos se consiguiesen diputados y formar coaliciones para seguir gobernando. Si es correcto que los socialistas hayan gobernado con partidos como Euskadiko Eskerra y el PCE. Es igualmente democrático que el PP gobierne con los que quieran darle sus votos. No como ahora, que siguen pensando que son la única respuesta contra el comunismo y sus afines. Hay que valorar, que los analistas políticos de estos tres últimos años coinciden en afirmar que el socialismo democrático (que no es democrático, es totalitarismo social), está cayéndose de la higuera y ya no convence al voto joven y el menor de 40 años que no ha recibido la promesa de una vida feliz, con coche, piso, parejas varias, animales de compañía, muchos viajes y drogas de diseño. Y la derecha, la que ustedes quieran, atraerá a estos decepcionados. Así, cuando las barbas de tu vecino veas cortar…