www.mallorcadiario.com

Experiencias inmersivas. Piénselo bien antes de acudir

viernes 16 de agosto de 2024, 05:00h

Escucha la noticia

La siguiente cursilada es cierta y sólo pasa, donde la cursilería está amparada por ley. También debería ser un toque de advertencia para tanto programador y comisario de museos en España que se han apuntado a las llamadas Experiencias Inmersivas y que no es otra cosa que convertir el espacio museístico en un Chiqui Park para Millenials adultos y que no tienen suficientes estímulos o están irremediablemente echados a perder.

En la fantasía Millenial del País de los Museos de las Maravillas de Alicia, concretamente en el “Museo del Helado” de Manhatan, cuya temática promete ayudar a los visitantes a “reimaginar la forma en que se experimenta el helado”, el pasado 12 de agosto el señor Jeremy Shorr que visitaba con su hija el espacio museístico resbaló y se dio tremenda costalada sufriendo supuestamente "lesiones personales graves y permanentes" al saltar en una piscina que no tenía profundidad suficiente. Vamos, lo que viene siendo una charca lavapíes. Las lesiones que sufrió le han causado “angustia y sufrimiento mental” y ha tenido que pasar por una intervención quirúrgica y lo han mantenido sin poder trabajar y reclama una indemnización no especificada al Museo del Helado en los Tribunales de Manhatan.

Se lo juro.

Ojito que en el País de las Maravillas, las demandas prosperan. Recuerdo en 1993 cuando una anciana demandó a McDonald’s en Chicago por haberse quemado la boca bebiendo café y los hamburgueseros en vez de darle un Diazepan, un McApplePie y una palmadita, tuvieron que indemnizarla con un millón de dólares de entonces. También se lo juro, que yo estaba allí.

Después de visitar la página para ver el recorrido museístico que se propone en el Museo del Helado, descubro que no se habla para nada de los orígenes históricos del helado, su evolución o el impacto de los cucuruchos en la sociedad post industrial global que como todo el mundo sabe, influyó significativamente en la victoria aliada de la II Guerra Mundia. También es harto conocido que el hecho que a Putin le guste el almendrado y a Zelensky el Frigodedo ha sido el verdadero causante de la guerra. Haggen Dass y la Menorquina tiemblan ante el poder de la emergente industria heladera china, que ha abierto una super planta en Wuhan al ladito mismo del laboratorio desde donde infectaron al mundo entero en 2019.Por tanto, el asunto del helado no es baladí.

El Museo del Helado se ha convertido en un elemento fijo, con ubicaciones en Nueva York, Austin, Chicago, Miami, Singapur y ponto en Boston.

Como Disney es políticamente incorrecto, ya saben: neocolonialista, racista, misógino capitalista y maltratador (recuerdo que en USA, lo de la madre de Bambi no se olvida), los Wokies se han inventado sus propios parques temáticos: cursis, de color de rosa chicle, inmersivos y políticamente correctos y que para justificarse les dan el toque cultureta y les llaman museos.

El ICOM (el Comité Internacional de Museos) ha tirado la toalla hace tiempo por falta de rigor de los museo en Wokeland , donde se inventaron lo de las Experiencias Inmersivas en los museos, aunque nosotros les hemos comprado la burra para no ser menos y más modernos que la Chica Yeyé, que en paz descanse.

Si en España ya hemos vivido falsas demandas por intoxicación en hoteles, no quiero pensar en el día que un imbécil se descalabre subiendo a un dinosaurio con gafas de realidad virtual o intente imitar el Duelo a Garrotazos de Goya en una Experiencia Inmersiva en nuestros museos.

Que de gilipollas, no andamos escasos precisamente entre la UNESCO, Wokies y ministros.

Jorge Llopis, pecadosdelarte.com

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios