El trágico suceso tuvo lugar en una casa de alquiler situada en la calle de Violer, sobre las 14.15 horas. En el interior del inmueble se encontraban ocho jóvenes turistas de nacionalidad neerlandesa. Uno de ellos encontró a su compañero de habitación inconsciente en el baño, en parada cardiorrespiratoria, y de inmediato llamó a los servicios de emergencia.
Hasta el lugar se desplazaron varias ambulancias del SAMU 061 y de Emergentes 24, así como agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional. Los detectores de monóxido de carbono de los sanitarios se activaron al entrar en la vivienda, lo que llevó a la evacuación preventiva del lugar.
Lamentablemente, los médicos no pudieron salvar la vida del joven y solo pudieron certificar su fallecimiento por intoxicación de monóxido de carbono. El compañero de habitación de la víctima, quien presentaba sangrado nasal y dolor de cabeza, fue trasladado a un hospital de Palma.
Las últimas informaciones señalan que este joven, del que no ha trascendido la edad, se encuentra en estado grave.
Este miércoles, el Grupo de Homicidios y la Policía Científica de la Policía Nacional regresarán a la vivienda para verificar si el termo había pasado las inspecciones correspondientes. Los turistas se marchaban ese mismo día del inmueble al finalizar sus vacaciones en la isla.