Alcaraz pasó por encima de Nole Djokovic en Wimbledon (cuarto Grand Slam a sus 21 años) al tiempo que Sergio García luchaba por otra victoria en Valderrama, la cuarta. Por la noche, una España invencible ganaba para nuestro país otra Eurocopa.
Vayamos con el golf. Sotogrande siempre ofrece espectáculo y este domingo no ha sido una excepción. Una última jornada de infarto pese a que en el día previo Anirban Lahiri se había postulado con solvencia para la victoria.
Jugadores de la talla de Jon Rahm, Bryson DeChambeau, Brooks Koepka o Cameron Smith daban muestras, pese a sus pinceladas de clase, de no ser rivales. Pero no Sergio García, uno de los mejores jugadores (o el mejor) de la historia del campo de Valderrama. Remontada de vértigo. Sus nueve primeros hoyos del jugador de Borriol rozaron la perfección, de manual. Cinco birdies y cuatro pares para dejar en nada la diferencia con Lahiri, que se había ido a la cama con seis de ventaja sobre el español y que veía como a mitad de recorrido la distancia se reducía a un solo golpe.
Entre Lahiri, Sergio García y Hatton parecía estar la victoria. Mientras, Rahm caía en la clasificación con dos bogeys, incómodo en los greenes e incapaz de mantener el buen juego para volver a la senda de las victorias. A falta de siete hoyos García se aupó al liderato junto a Lahiri. Siete hoyos por delante en Valderrama, todo un mundo y muchos alcornoques que sortear.
El golpe lo devolvió pronto el hindú para volver a coger una ventaja mínima, con Hatton algo más descolgado. El empate en cabeza volvió a falta de cuatro hoyos para el final tras un bogey de Lahiri, que se mostró nervioso durante toda la vuelta. Al contrario que Sergio, que minimizó sus errores y se plantó en los últimos tres hoyos del recorrido sin un solo bogey, algo verdaderamente difícil de conseguir en el campo andaluz.
El final mostró la grandeza y la crueldad del golf. Fue en el hoyo 16 cuando "el niño" alcanzó el liderato en solitario tras otro error de Lahiri. El hindú lo solucionó en el siguiente hoyo con un maravilloso birdie gracias a un purazo de no menos de seis metros. Sergio falló en el último hoyo, primer bogey del día, y dejaba el título en bandeja a Lahiri.
Estaba acariciando el título y los milloncejos el hindú, le quedaba un putt de menos de medio metro para su victoria individual y también por equipos. Falló, quizás el putt "económicamente" más doloroso de la historia (El ganador de cada cita del circuito saudí se lleva 4 millones de dólares, mientras que el segundo clasificado se queda 'solo' con 2.250.000 millones).
Esto abocaba a un playoff individual y por equipos. El hoyo 18 vió la victoria de los Fireballs de Sergio en un playoff que enfrentó a Puig & Ancer vs Casey & DeChambeau. Vaya último putt, kilométrico, ejecutó el catalán para dejar la bola dada y facilitar el camino al mejicano Ancer al que le valían dos putts para la victoria del equipo de Sergio. Par fácil.
Victoria clara en el primer hoyo de desempate. En el desempate individual, el de Borriol hizo valer su conocimiento de Valderrama para ganar su primer torneo del LIV a nivel individual y firmar su cuarto triunfo en Valderrama. Muchos días después Sergio volvía a levantar un trofeo en un campo talismán y en España.
Jon Rahm sigue sin levantar cabeza. Mucho público, pero como hemos dicho en diferentes ocasiones al Liv le falta o le sobra algo. A nosotros particularmente no nos emociona.
En resumen, "todo al rojo" en la tarde de este domingo de mitad de julio. Viva el golf, viva el deporte y Viva España.