En pocos días, los diputados del PSIB-PSOE han optado por ausentarse del Parlament como acto de protesta. Lo hicieron en la Comisión de Investigación de la compra de mascarillas. Lo hicieron también en el pleno del pasado martes, cuando se iban a votar las conclusiones de aquella Comisión de Investigación. Y lo hicieron nuevamente el pasado jueves, durante la comparecencia de la presidenta del Govern, Marga Prohens, para informar de la Mesa de Sostenibilidad.
De este modo, los socialistas tratan de reventar la actividad ordinaria de la Cámara y acaparar titulares, además de trasladar la confrontación política a las calles, a través de la “mayoría social” que dicen ostentar. Dado que en mayo de 2023 perdieron la mayoría política y parlamentaria, pasando a la oposición, consideran que lo más efectivo para sus intereses es cambiar de cancha y acomodarse a una donde no pierdan cada votación, como viene sucediendo en el Parlament.
Sin embargo, esta estrategia no está exenta de riesgos. La continua ausencia demuestra un abandono de sus responsabilidades parlamentarias. Y un desprecio al parlamentarismo y a la ciudadanía allí representada. Pero también es cierto que esta estrategia permite al PSOE mantener movilizado y en tensión al electorado de izquierdas.
"La actitud del PSOE en el Parlament es una táctica clara para trasladar la tensión política al ámbito social, tratando de compensar su falta de mayoría parlamentaria"
La actitud del PSOE en el Parlament es una táctica clara para trasladar la tensión política al ámbito social, tratando de compensar su falta de mayoría parlamentaria. Esta estrategia, aunque comprensible desde una perspectiva de movilización política, erosiona el clima político y favorece la crispación.
Los 18 diputados del Grupo Socialista cobran por asistir a las sesiones plenarias y a las comisiones del Parlament. No hacerlo por sistema, con el pretexto de exteriorizar una protesta, no es admisible porque la política ha de hacerse en las instituciones y no en las calles, como defiende el portavoz parlamentario, Iago Negueruela. Si lo que no soportan es perder votaciones, deberían revisar sus principios democráticos. Los ciudadanos les han situado en la oposición y eso es lo que deben hacer, pero desde sus escaños; escuchando los argumentos del resto de formaciones políticas, aunque no les gustan y no los compartan. Esto y no otra cosa es la democracia parlamentaria. Pero el PSOE prefiere estar fuera del Parlament.