La inflación ha subido tres décimas en mayo, hasta el 3,6 por ciento -la tasa más alta desde abril de 2023-, debido principalmente al encarecimiento de la electricidad y a la menor bajada de los precios de los carburantes.
Según el dato adelantado del Índice de Precios de Consumo (IPC) publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), han tirado al alza de la inflación la electricidad, que ha subido este mes frente a la bajada de hace un año, y los carburantes, cuyos precios han disminuido menos.
La tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente -el índice sin alimentos no elaborados ni productos energéticos- ha aumentado una décima en mayo, hasta el 3 por ciento. La inflación subyacente rompe una tendencia de nueve meses a la baja, desde julio de 2023, cuando la tasa estaba en el 6,2 por ciento, mientras que la inflación general lleva tres meses consecutivos al alza.
En tasa mensual, los precios de consumo han registrado una subida del 0,3 % y han encadenado cinco meses al alza, aunque se han moderado cuatro décimas respecto a abril, según detalla el INE.