La primera parte ha sido una continuación de la segunda de la ida celebrada hace una semana en Bilbao, con los barralets, con el hijo de Javier Olaizola en el once y el presidente Andy Kohlberg en una abarrotada única grada, dominando la posesión y generando numerosas aproximaciones. Sin embargo, los chicos de Carlos Muñoz erraban en sus definiciones o se topaban con un inspirado Simón García, como el goleador Woiski tras un saque de esquina.
Cuando parecía que se llegaría con el empate inicial al descanso, ha aparecido Nico Baratucci ha empatar la eliminatoria con un soberbio testarazo tras un pase de Calcagno. Y tan solo dos minutos después de que el cuero volviera a rodar, el argentino ha aprovechado otra asistencia del uruguayo para poner el 2-.0 en el marcador.
Los vascos, curiosamente vistiendo del turquesa que lució el primer equipo mallorquinista en la final de La Cartuja, han podido empatar con un chut lejano que ha despejado Joan Pol. Luego, la defensa ha sido providencial para frustrar un remate de Dani a bocajarro y más tarde, otro bajo palos.
En el tramo final, los jóvenes Leones se han volcado en busca de un tanto que forzara la prórroga, mientras los bermellones amenazaban en sentenciar en alguna contra. Tampoco ha importado. El RCD Mallorca luchará por alzar el tercer título de una histórica e inolvidable temporada.