El responsable de Turismo de la institución insular ha confirmado la apertura del expediente al establecimiento, en el marco de las centenares de inspecciones que el departamento que dirige está llevando a cabo para combatir la oferta ilegal. "El anterior equipo de gobierno no actuó con el compromiso que tenemos ahora", ha insistido Rodríguez.
Respecto al actual expediente, el conseller insular no ha concretado los motivos que han llevado a los inspectores a iniciarlo, asegurando que no ha consultado el redactado y que, en todo caso, es secreto. Así, tampoco ha concretado a qué sanciones se enfrentaría la hospedería que gestiona el Obispado de Mallorca.
PREOCUPADO POR LA SATURACIÓN TURÍSTICA
Con el inicio del expediente se abre un periodo de alegaciones que podría prolongarse durante varios meses y que, de momento, no tienen efecto en la actividad, que sigue anunciándose en plataformas de reservas.
José Marcial Rodríguez ha calificado como fortuito el hecho de que el conocimiento del expediente sancionador se haya conocido precisamente pocos días después de que el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, expresara su preocupación por la saturación que sufren las carreteras de Mallorca y que afectan a menudo a este enclave.
Desde el Obispado han mostrado este miércoles su disposición y voluntad de subsanar cualquier irregularidad que se pueda detectar, si finalmente así sucede, en la hospedería del Santuario de Lluc, aunque apuntando que, de momento, ni el Obispado ni el Santuario han recibido comunicación alguna en forma de expediente o denuncia por parte de la institución insular y que el único documento disponible a día de hoy es el acta que los inspectores redactaron tras su visita al santuario la pasada semana.
En todo caso, independientemente de que este procedimiento acabe o no en una sanción, el Obispado insiste en que en ningún caso existe la voluntad de mantener ninguna irregularidad y que pondrán en regla o actualizarán cualquier situación que se requiera, si finalmente así se reclama.