Dos habitaciones en un piso de 70 metros cuadrados para 14 personas, estas han sido las claves que han llevado a la Policía Nacional a destapar una serie de empadronamientos ilegales en un domicilio particular de Sant Llorenç des Cardassar.
La investigación la llevó a cabo la Brigada de Extranjería de la Policía Nacional de Palma, en estrecha colaboración con la Comisaría Local de Manacor.
Se da la circunstancia de que la mujer que ha autorizado todos estos empadronamientos no ha tenido inconveniente en reconocer su responsabilidad, aduciendo que lo hacía para ayudar a estos inmigrantes y que estos le pagaban pequeñas cantidades de dinero como agradecimiento.
Por otro lado, los policías de la UCRIF que se han entrevistado con alguno de estos inmigrantes empadronados indebidamente, han sido informados de que la mujer cobraba entre 150 y 200 euros por empadronamiento.
A la supuesta responsable de estas infracciones graves a la Ley de Extranjería se le ha incoado un Expediente Sancionador por catorce infracciones, proponiendo una sanción de 14.000 Euros, al tratarse de infracciones agravadas y existir de forma inequívoca un ánimo de lucro, por parte de la infractora.