La construcción de una terraza en Es Baluard para un negocio de restauración ha sido criticada por la Asociación ARCA por considerarla invasiva y que afecta al entorno patrimonial. ARCA cuestiona si la intervención tienen los permisos necesarios.
La construcción de una terraza, con ladrillos de obra y una altura superior a los 20 centímetros, que ocupa una gran parte de la terraza de Es Baluard para un negocio de restauración, ha sido criticada por la Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos (ARCA) y calificada de "invasiva".
En un comunicado emitido este miércoles, la Asociación ARCA ha expresado que la obra "coloniza el entorno patrimonial y afecta a la muralla, demostrando desprecio, como si fuera un decorado donde colocar sus intervenciones".
También ha expresado su queja sobre la construcción de un cerramiento para la lámina de agua, considerándolo "innecesario y despersonalizante". Además, ha mencionado que se están instalando pérgolas fijas que tendrán un efecto pantalla sobre los muros.
Han afirmado, por otro lado, que las intenciones son claras y que se busca gozar de un espacio privilegiado para el beneficio de un negocio, "sin demostrar respeto por el propio monumento".
"Para recuperar una parte de la historia y del paisaje" de la isla, desde ARCA recuerdan que la rehabilitación de Es Baluard se realizó con dinero público. Por lo tanto, consideran que es "admisible" un negocio de restauración que ocupe una parte de la terraza, "pero no una invasión estética que tapa y distorsiona", subrayan desde ARCA.
Igualmente han expresado su "preocupación" debido a que esta intervención podría dificultar o incluso impedir que la población disfrute libremente de todo el perímetro del mirador.
"Resulta paradójico que, en uno de los lugares patrimoniales por excelencia, como es el Baluard, se permita construir un chill out, mientras que la normativa que regula las terrazas prohíbe los toldos y obliga a tener únicamente sombrillas", han defendido.
"Es una demostración más de la mala gestión pública y de no tener un criterio estricto con la protección del paisaje patrimonial", según ARCA. Por otro lado, consideran que la propuesta es "muy desafortunada y colonizadora". Además, se cuestiona si "realmente cuenta con los permisos de Patrimonio".