Los hechos se produjeron el pasado martes 18 de octubre, por la mañana, momento en el que la sala del 091 recibió una llamada que alertaba de que una mujer había sido agredida por su pareja.
Varias patrullas policiales se personaron en el lugar, siendo requeridos por un hermano de la víctima, quien indicó que la mujer había sido agredida por su compañero sentimental y que ambos se encontraban en el domicilio, entregando a los agentes una copia de la llave de la puerta.
Los efectivos policiales accedieron al domicilio y se percataron de que el presunto agresor intentaba huir por el balcón del primer piso, siendo finalmente interceptado.
EN OTRO EPISODIO DE VIOLENCIA, MORDIÓ EL BRAZO DE LA VÍCTIMA
La víctima indicó que el día anterior su pareja le había agredido, agarrándola por el cuello y golpeándole contra la pared. Según manifestó, estos episodios se habían repetido con anterioridad e incluso, en una ocasión, el hombre le había mordido en el brazo. La víctima relató asimismo que, horas antes, el sospechoso la había cogido por los hombros y la había llevado al dormitorio a la fuerza. Una vez allí, la agredió sexualmente.
Además de los hechos relatados, los agentes averiguaron que el hombre, supuestamente, se dedicaba a vender droga y que podría disponer de sustancias estupefacientes. Tras un registro, los policías localizaron en la vivienda más de 65 gramos de una determinada sustancia que dio positivo en el test a cocaína, así como diversos útiles.
Los policías también comprobaron que sobre el hombre pesaba una orden de alejamiento respecto a la víctima de esta agresión, por lo que finalmente procedieron a su detención como presunto autor de un delito de malos tratos, agresión sexual, quebrantamiento de condena y contra la salud pública.
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