¡Cuesta abajo, sin frenos: Casado, Abascal y Belén Esteban!

Pablo Casado es el acabose. Un pelín más facha y no nace.

Su historia política, no tiene otra historia que llevarse a la boca porque siempre ha vivido del dinero público, está plagada de declaraciones que han ido dejando claro que es un verdadero hijo del más abyecto, vil e ignominioso franquismo.

En el transcurso de la sesión de control al gobierno de este miércoles en el Congreso, de nuevo quedó demostrado que la concordia entre las diferentes fuerzas políticas es más que imposible con palabras insultos, falsedades y manipulaciones históricas por parte de la soez derecha que padecemos.

El líder del PP, Pablo Casado, leyó, de un papel que llevaba escrito: “La Guerra Civil fue el enfrentamiento entre los que querían la democracia sin ley y los que querían la ley sin democracia”, obviando que la Guerra Civil fue una sublevación de una parte del ejército contra la ley de un orden constitucional de un gobierno legítimo, elegido en unas elecciones libres, justificando de forma clara el franquismo sin importarle decir este tipo de barbaridades.

No es que los últimos años sienta el aliento de la ultraderecha en el cogote que le está comiendo terreno en el ámbito de la derecha tramontana y carpetovetónica española (según lo define la R.A.E.: "De los carpetanos y los vetones, o que está relacionado con ellos. Persona, costumbre, idea que se tiene por española a ultranza o se defiende como tal y sirve de bandera ante cualquier influjo externo"). Es que Casado siempre ha sido así de infame, junto a otros representantes de su partido. Un ejemplo de los muchos que hay en las hemerotecas bastará.

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) presentó en el año 2015 ante la Fiscalía General del Estado un informe sobre situaciones en las que las víctimas de la dictadura franquista habín sido humilladas por cargos públicos del Partido Popular. En concreto, las acusaciones se dirigieron contra el entonces portavoz Rafael Hernando, quien aseguró que algunas víctimas de la dictadura sólo se acordaban de sus padres cuando había subvenciones; contra el responsable de Comunicación, Pablo Casado, que menospreció públicamente las fosas en las que están 114.226 civiles desaparecidos por la represión franquista, y contra Manuel González Capón, que llevaba al frente del consistorio lucense desde el año 1987 y quien en un pleno aseguró que los asesinados por el franquismo se lo merecían.

El franquismo no fue ley sin democracia, como impúdicamente quiere hacer creer Casado; fue un golpe militar contra la ley para suprimir la democracia. Es de vergüenza ajena que haya en España partidos que justifican el franquismo y el golpe de estado que llevó a la guerra civil. Eso es impensable en los países europeos, porque tanto la izquierda como la derecha democrática rechazan toda forma de fascismo. No es propio del centro derecha europeo que aspira a gobernar un país. Ha equiparado un Gobierno legítimo con un golpe de Estado fascista, y con un argumento falso.

La declaración del líder del PP está basada en la 'ignorancia de la extrema derecha', lo que, una vez más, demuestra que, además de la carrera y los máster, le regalaron el BUP, el COU, la primaria y la educación infantil, y que cuando el profesor de historia explicó la guerra civil él tampoco fue a clase. Tanta maliciosa ignorancia junta es difícil de encontrar.

¿Cómo es posible que tamaño menda quiera ser Presidente de España si tan siquiera diferencia entre una República democrática y un golpe de estado fascista? En cualquier otro país europeo ni siquiera podría ser el líder de la oposición.

¿Qué pintan Abascal y Belén Esteban en este articulo de opinión? Que los tres son igual de incultos, sinvergüenzas y fachas.