Desde hace algunos años, la proliferación de colonias de palomas se ha convertido en un problema en numerosas zonas del municipio de Santanyí. Los excrementos de estas aves contaminan pozos que recogen agua de lluvia, destrozan tejados y provocan goteras.
Por ello, el Ayuntamiento de Santanyí, tras recibir numerosas quejas por parte de los vecinos, ha puesto en marcha una medida que tiene como objetivo reducir el actual número de aves en el término municipal. En este punto, la alcaldesa de Santanyí, Maria Pons, ha explicado que “tenemos un convenio con la Fundación Natura Parc y contamos con ellos para intentar resolver el problema de las palomas. Tal y como han hecho en otros municipios, nos han cedido una serie de jaulas que hemos instalado en diferentes puntos del término, que atrapan las aves. Después técnicos de Natura Parc vienen, y se las llevan".
Se han instalado jaulas en diferentes puntos del municipio como como la iglesia y el Teatro Principal de Santanyí, local parroquial de sa Alquería Blanca, local parroquial de Calonge o la iglesia des Llombard. El Agente de Vigilancia Rural de Santanyí, Damià Obrador ha explicado que los resultados de esta medida se verán, sobre todo, a partir del año que viene, puesto que al atrapar estos animales también se deshacen los nidos. Esta es la única manera de resolver un problema que se estaba convertido en una plaga.
Los excrementos de estos animales son tan corrosivos que llegan a oxidar todo aquello con lo que entran en contacto. Por eso, estas jaulas se irán trasladando y colocando en función de cada situación para conseguir una óptima eficacia