Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que recogen la evolución del mercado turístico en España hasta el mes de noviembre, cuando se contabilizaban 18,3 millones de turistas, el registro de visitantes no se situará por encima de los 20 millones.
También el gasto registrará un fuerte descenso: de los 92.278 millones de euros que dejaron en España los turistas extranjeros en 2019 se pasará a unos 20.000 millones, tomando, nuevamente, como referencia el periodo entre enero y noviembre de 2020, cuando el gasto acumulado apenas se situaba en 19.044 millones.
Para encontrar una estadística semejante relativa al volumen de la demanda vacacional en España habría que retroceder hasta el año 1970, cuando el conjunto del país acogió a unos 20 millones de turistas, el doble que seis años antes, coincidiendo con la fase de la expansión de la industria. Desde entonces, aun con algún recorte puntual, las llegadas no han dejado de crecer hasta 2020, en que la pandemia ha obligado a paralizar casi completamente la oferta del sector.
PIB TURÍSTICO
De esta manera, los informes que ha llevado a cabo Exceltur reflejan que 2020 se cerró con un desplome del PIB turístico, contabilizando la actividad directa y la indirecta, de 106.000 millones de euros, con un decrecimiento del 69 por ciento en relación a 2019, cuando este indicador alcanzó los 154.487 millones. Estas estadísticas suponen que el turismo español ha regresado a los niveles de 25 años atrás, en 1995.
El descomunal castigo que la pandemia ha supuesto para uno de los grandes motores económicos del país ha implicado también consecuencias en el peso del turismo en el PIB, que en 2019 supuso el 12,4 por ciento y un año después se ha quedado en apenas el 4,3 por ciento, siempre según los datos que facilita Exceltur. Desde esta corporación, surgida a partir de la alianza de algunas de las empresas más relevantes del sector, se calcula que el impacto de este desplome en el empleo ha afectado en el caso de España a 728.000 personas, de las que 435.000 se hallan acogidos a expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) y otras 293.000 se han quedado literalmente en la calle.
TURISTAS NACIONALES
A la caída experimentada por el turismo internacional, con el balance deficitario de 63 millones de visitantes menos, hay que sumar el descenso registrado en los movimientos interiores, es decir, en los viajes de españoles a otras comunidades autónomas, que se han reducido en más del 40 por ciento.
Con vistas al año recién iniciado, Exceltur anticipa que el PIB turístico puede alcanzar los 96.369 millones de euros, con un crecimiento, por tanto, de 48.000 millones respecto a 2020, pero todavía un 37,6 por ciento por debajo de los 154.487 millones de 2019. Si estos cálculos se cumplen, el porcentaje del PIB aportado por la actividad turística escalaría hasta el 8,2 por ciento.