El cementerio de Porreres reanudará en breve las obras de excavación y demolición

Durante estas últimas semanas, los familiares de las personas enterradas en estos nichos y capillas han trasladado temporalmente los restos a otras sepulturas propiedad de la familia, o bien a los nichos de alquiler de los que dispone el Ayuntamiento de Porreres, que ha puesto estos espacios a disposición de quienes los han necesitado.

De esta manera, los operarios de la empresa constructora han instalado este lunes los andamiajes necesarios para empezar a retirar los elementos patrimoniales de estas tumbas. El objetivo es evitar que sufran desperfectos durante las obras y puedan volver a instalarse cuando vuelvan a construirse los nichos.

En el inicio de estas tareas han estado presentes la alcaldesa de Porreres, Xesca Mora; el secretario autonómico de Memoria Democrática y Buen Gobierno, Jesús Jurado; el director general de este departamento, Marc Herrera, y el presidente de la Comisión de Memoria de Porreres, Miquel Àngel Veny.

"HAY UNA DEUDA CON LOS FAMILIARES"

Según Jesús Jurado, se trata de unas obras “largamente esperadas” que surgen de la “deuda con los familiares de las víctimas enterradas en el cementerio de Porreres”. El cargo autonómico ha recordado cómo hace dos años el proyecto de excavación y exhumación de la fosa número 5 quedó en suspenso debido al entierro, en julio de 2018, de una persona en este bloque de nichos. La legislación sanitaria impone un plazo de dos años para que se puedan trasladar estos restos, que ha expirado este 2020.

Durante este tiempo, la Conselleria de Administraciones Públicas y Modernización, a la que está adscrita la Secretaría Autonómica de Memoria Democrática y Buen Gobierno, y el Ayuntamiento de Porreres han firmado un convenio de colaboración para la coordinación de las actuaciones relativas a la fosa número cinco del cementerio del municipio, con el objetivo de dotar de seguridad jurídica a las actuaciones pendientes.