El turismo nacional se convierte en pieza clave para el sector mientras que no se tenga una vacuna efectiva. Es lo que opinan los expertos.
Una vacuna que sea eficaz contra el coronavirus será fundamental para la reactivación del sector turístico en España, principalmente el internacional, pero mientras tanto el turismo nacional será uno de los pilares del sector.
Así lo han expresado este jueves el presidente de AC Hoteles, Antonio Catalán, el consejero delegado de W2M World2Meet, Gabriel Subías, y el consejero delegado de HIP, Alejandro Hernández-Puértolas, que han participado en un webinar del Círculo Ecuestre sobre el turismo post-COVID-19.
Catalán ha señalado que hasta que no se recupere el flujo de vuelos internacionales de forma regular, al turismo le va a costar despegar, y que sin la vacuna "no se va a volver de ninguna manera a la normalidad", aunque ha vaticinado una recuperación en forma de V una vez se encuentre la vacuna.
El norte de España será la zona que más se beneficiará de este turismo nacional, según Catalán, que no cree que ocurra lo mismo con el turismo de playa.
Por su parte, Subías ha señalado que este verano se van a hacer "tímidos intentos" para recuperar la actividad hotelera, pero las compañías no contemplan un restablecimiento de la operación normal hasta invierno, y ha situado la recuperación de la "normalidad" en el próximo verano.
También ha apuntado que "arrancar la maquinaria" hotelera no es fácil y que no se hará rápidamente, y ha apuntado que hasta que no haya un número de clientes extranjeros que hayan venido al país y hayan vuelto con normalidad no habrá una "afluencia masiva" del exterior.
ESTOCADA PARA LAS EMPRESAS CON PROBLEMAS
Subías ha señalado que echa de menos una mayor colaboración público-privada en la gestión de la reapertura del país, y ha indicado que la "permanente improvisación" que, bajo su punto de vista, está efectuando el Gobierno se podría atemperar con un "diálogo" con el sector privado.
A nivel de mercado, Hernández-Puértolas ha opinado que esta crisis "matará" a las empresas que ya estaban mal previamente, que se va a producir un proceso de concentración y que las marcas cobrarán más relevancia especialmente por la "seguridad" que se les asocia.
También ha augurado que se producirán procesos de venta de activos en ciertas compañías para rebajar sus deudas.
Sobre la situación de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), Catalán se ha mostrado convencido de que serán "de forma escalonada" en función de las necesidades, y ha añadido que si los ERTE aguantan no habrá "un descalabro" como el de 2008.