El jueves, un conocido empresario mallorquín reunió en torno a 500 personas en su ya tradicional comida de final de temporada. Según ha podido saber El Infiltrado de mallorcadiario.com, a la convocatoria, en su propia finca, asistieron otros empresarios, hoteleros, representantes de entidades, alcaldes y políticos de todas las instituciones y de casi todos los colores del arco parlamentario.
El anfitrión decidió concluir el evento con un regalo, de forma que procedió a sortear entre los asistentes dos entradas para el duelo de este sábado entre el Mallorca y el Real Madrid. De mano inocente ejerció un ex presidente de la entidad vermellona quién, para sorpresa de los asistentes, sacó la papeleta que le correspondía a Biel Company. Entre risas, y sorprendido él mismo por su suerte, Company declinó el regalo esgrimiendo que, por razones de su cargo, no podía aceptar las invitaciones.
Company se quedó con el buen sabor de boca de saberse tocado por la fortuna y otro de los asistentes, una vez repetido el sorteo, consiguió las ansiadas entradas.