Paradas de autobús inteligentes, paneles de información turística interactivos y sistemas de recuento de visitantes en faros y yacimientos históricos son algunos ejemplos del proyecto "Smart island Mallorca" presentado este jueves en la feria ITB de Berlín sobre las medidas a implantar en la isla.
La "Mallorca del futuro" se ha presentado en el expositor de ITB, con este proyecto que combina el uso de tecnología y la obtención de datos, con la difusión de información en cuestiones como la gestión del tráfico, con sensores a tiempo real que informarán de la situación de las carreteras, ha informado el Consell en un comunicado y un vídeo.
Por ejemplo, en cuanto al tráfico, el proyecto prestará especial atención a las carreteras turísticas sin salida y a aquellas situadas en la costa y en la montaña, y permitirá regular sus flujos, señala la institución.
También se contabilizará el flujo de visitantes a edificios, faros y elementos patrimoniales para regularlo; se instalarán más estaciones meteorológicas para conocer la situación en distintos puntos de la isla, y sistemas de riego inteligentes en las zonas verdes de lugares públicos que detectarán la falta de agua o de nutrientes antes de ponerse en marcha.
El director insular de Modernización e Innovación, Josep Lluís Colom, ha explicado las actuaciones del proyecto, que se organizan en seis áreas temáticas: turismo, movilidad, eficiencia energética, patrimonio, gobierno abierto y resiliencia.
Colom ha detallado que la primera reunión técnica de inicio del proyecto, que está en fase de adjudicación, será el próximo 13 de marzo y servirá para fijar un calendario de las diferentes iniciativas, que deberán estar ejecutadas en plazos de entre 24 y 36 meses.
El proyecto "Smart Mallorca", tiene un presupuesto de 8.876.247 euros que aportará por completo el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo por medio de la entidad pública Red.es, después de que la iniciativa fuera seleccionada en 2016 como beneficiaria de la I Convocatoria de Islas Inteligentes.
El principal objetivo del proyecto es mejorar la calidad de vida de los habitantes de la isla, dinamizar el turismo ofreciendo una mejor experiencia a las personas visitantes y ampliar el impacto en la economía mallorquina, apoyar a las corporaciones locales que no dispongan de las herramientas necesarias para tomar impulso como activo de la isla.