Durante su declaración, el acusado ha negado los hechos y ha asegurado que era ella la que le chantajeaba con tener relaciones sexuales. Según ha dicho, si no tenían relaciones, ella le amenazaba de "no volver a ver" a la hija que tienen en común. "Me dijo que si tenía sexo con ella una vez a la semana, la podría ver", ha remarcado.
Según ha explicado, la acusación contra él le parece un asunto "muy extraño". "Me ha pasado por ser demasiado tonto, por querer arreglar las cosas para que mi hija tuviera una vida normal".
De esta manera, ha dicho que si entró en la casa, es porque le abrieron ya que él no tenía llave y que sí hubo sexo pero que este fue consentido y lo realizó "con cariño". Por esto, ha dicho que no sabe el motivo de las lesiones que la víctima denunció sufrir en cuello y brazo.
Sobre esto, los médicos forenses que atendieron a la mujer de urgencia, han explicado que "no tenía lesiones", aunque, posteriormente han matizado que el relato de la víctima "era compatible" con que el hombre la agarrara en el momento de la presunta agresión sexual.
-Habrá ampliación-