El vandalismo no queda impune, ni pagar los malos humos con el mobiliario urbana. Bien lo ha aprendido el ciudadano al que la Policía Local de Palma le ha dado una lección de civismo. El hombre arremetió a patadas con una papelera hasta arrancarla, dejarla inservible y esparcir la basura por la calle. Aleccionado por los agentes ha tenido que recoger el estropicio. Y han difundido el vídeo del momento.
Así lo ha contado la propia Policía Local de Palma: “Una papelera urbana fue el objeto de un ataque de ira, en forma de patadón. Primero hay que contar hasta diez , que ni el arrepentimiento espontáneo ni las buenas intenciones te van a librar de un informe judicial por daños”.