La caída de las acciones hizo descender alrededor de 24 mil millones de dólares el valor de la compañía y convirtió a sus acciones en el mayor lastre de los índices Dow Jones y S&P 500.
Según informa Reuters, J&J conocía la presencia de pequeñas cantidades de amianto en sus productos desde 1971, tal y como figura en numerosos informes internos y otros documentos confidenciales de la farmacéutica.
El informe de también mostró que la compañía había encargado y pagado los estudios realizados en su franquicia Baby Powder y contrató a un escritor fantasma para redactar nuevamente el artículo que presentaba los hallazgos en una revista.
J&J ha hecho frente a unas 6,000 casos que afirman que sus productos Baby Powder y Shower to Shower causan cáncer de ovario. Los productos también se han relacionado con el mesotelioma, una forma rara y mortal de cáncer que afecta el delicado tejido que recubre las cavidades del cuerpo.