Las 120 familias que han participado en los diferentes programas de intervención en grupos que ha impulsado el departamento de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Manacor han celebrado el éxito que ha supuesto la primera edición de esta iniciativa. El pasado lunes los participantes se reunieron en la sala de actos de la escuela La Salle y juntos hicieron un repaso de todo lo que han trabajado las familias y los adolescentes que forman parte.
La delegada de Servicios Sociales, María Isabel Bauzá, dejó claro que desde el departamento "apostamos por la continuidad del programa, con dos objetivos bien concretos: trabajar en el nivel de la prevención de dificultades en la adolescencia, que puede ser una etapa delicada, y en segundo lugar atender a la población de manera universal para que absolutamente todos los ciudadanos de Manacor puedan beneficiarse de los programas de los servicios sociales ".
Durante la clausura la técnica del departamento Margalida Mayol, que ha sido una de las coordinadoras de estos programas de intervención grupal en familia, junto con Francesca Dalmau, explicó que "hemos ido a trabajar el autoconocimiento y la comunicación a diferentes clases de las escuelas e institutos de Manacor y también hemos trabajado con grupos más pequeños de adolescentes, de 12 a 18 años ". Desde los Servicios Sociales han utilizado dinámicas y juegos y "hemos descubierto que es fácil ser muy críticos con uno mismo y que nos tenemos que acostumbrar a descubrir la parte buena que tenemos todos, hemos trabajado con la tolerancia para que todo el mundo tiene su parte de razón ", explicó Mayol.
Las profesionales de los Servicios Sociales durante las diferentes sesiones en grupo también han incidido en la importancia de la comunicación. "Muchos jóvenes y muchos padres han descubierto que quizás no escuchan con atención, han aprendido que es necesario tomar tiempo para escuchar y asimilar lo que nos dice el otro antes de responder", añadió Margalida Mayol.
En cuanto a los padres y madres "hemos insistido en los principios que rigen los sistemas familiares y que hacen que sean saludables porque debemos saber quiénes somos en la familia y desde donde ponemos los límites", remarcó Mayol. Y antes de agradecer la dedicación de los padres y madres y la de los diferentes orientadores de los centros escolares, desde los Servicios Sociales han insistido que "la única manera de enseñar es el ejemplo".
El trabajo hecho tanto con los padres como con los jóvenes adolescentes se han fundamentado en las terapias denominadas de tercera generación, una teoría sistémica y su aplicación a la pedagogía, la teoría de la
gestalt y de la programación neuro-lingüística. Todos los talleres han contado también con un pequeño espacio de atención plena y meditaciones guiadas, que los asistentes han valorado muy positivamente.