www.mallorcadiario.com

Un incidente que merece una explicación

domingo 04 de junio de 2017, 03:00h

Escucha la noticia

Una tragedia aconteció este viernes en la calle Sant Miquel de Palma, al desprenderse un enorme farol metálico del alumbrado público y golpear violentamente en la cabeza a un niño alemán de 7 años que estaba paseando con sus padres. El menor se encuentra en estado crítico en el Hospital de Son Espases. Estamos hablando de un episodio absolutamente inexplicable, pero que debe ser objeto de una minuciosa investigación por parte de las autoridades.

Por ahora lo único que se sabe es lo que ha dicho el alcalde, José Hila, al afirmar que las circunstancias del accidente "no están claras" y que la empresa responsable del alumbrado público de la ciudad revisó la farola hace aproximadamente un mes. Nada de lo que ha apuntado el primer edil contribuye lo más mínimo a arrojar luz sobre un caso trágico que ha de ser perfectamente explicado a la ciudadanía y ha de hacer que alguien asuma alguna responsabilidad por lo ocurrido.

No es la primera vez que el mobiliario urbano propiedad de un ayuntamiento causa graves lesiones a una persona. Es inevitable recordar el fallecimiento de un joven, David Grimaldos, en Bunyola tras resultar electrocutado por el mal estado de una farola. El alcalde y el electricista municipal acabaron siendo juzgados y este último resultó condenado a 2 años de cárcel. Sin ánimo de establecer comparaciones, procede exigir que se aclare por completo un incidente dramático que mantiene en la UCI al hijo de unos turistas que estaban visitando la ciudad y que se explique debidamente