www.mallorcadiario.com

Que se vayan todos

Por Joana Maria Borrás
domingo 31 de julio de 2016, 03:00h

Escucha la noticia

Si nos vemos obligados a ir a unas terceras elecciones, quiero que se vayan todos. Que ni un sólo cabeza de lista pueda repetir. De no ser así, haré campaña intensiva para promover la abstención.

Sólo en una comedia del absurdo podría acontecer, sin ruborizarse el público, que tantos seres ávidos de poder, nos reciten una y otra vez el mismo mantra, con las mismas palabras, los mismos gestos y las mismas poses, durante meses, si tomarse la molestia, de dar un paso atrás, para ver la escena desde la objetividad del patio de butacas.

Rajoy tiene que formar Gobierno aunque sea en minoría, y si no puede, que se vayan todos: RAJOY, SANCHEZ, RIVERA E IGLESIAS, al gallinero, y le den una oportunidad a quien sea en cada Partido, para que los espectadores tengamos al menos un entretenimiento nuevo, el tiempo que tardemos en descubrir que, otra vez, será más de lo mismo.

Si el Gobierno a constituir fuera una empresa privada, en primer lugar, ya habrían rodado cabezas. En segundo lugar, ya se habrían celebrado las reuniones urgentes necesarias para cambiar el formato y el procedimiento para la toma de decisiones y para la sucesión ágil del equipo directivo. Si esto fuera una empresa privada, a un tío que cada mañana nos soltara el mismo rollo con las mismas palabras, para no avanzar nada el resto del día, le enviaríamos de inmediato al paro sin contemplaciones. Si esto fuera una empresa privada, ya habríamos denunciado a muchos por utilizar el tiempo de trabajo, por el que están cobrando, en menesteres personales y privativos. Es un absurdo que alguien pueda estar cobrando como Diputado o Senador desde hace meses, y estar utilizando el 90% de su tiempo en actos electoralistas de toda índole, y en apariciones públicas que redundan en beneficio de su Partido Político, de si mismo, pero no en beneficio del bien común, y de la ciudadanía en general.

Pero esto no es una empresa privada, y por este motivo andamos encallados sin remedio, entre una clase política que pasara a la historia por su inoperancia, una clase funcionarial que mantiene el ritmo de las instituciones como si de una máquina ajena a quien la pilota se tratara; y una clase empresarial (de pequeños, medianos y grandes empresarios y autónomos), que hace lo imposible por no verse afectada por tamaña desidia e inutilidad.

Por eso quiero que se vayan todos, porque si tengo que ir a votar otra vez antes de Navidad, necesito ver caras nuevas, para no sentirme idiota si deposito mi voto en
las urnas por tercera vez.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
2 comentarios