Razones para seguir celebrando el Orgullo

Porque la homosexualidad sigue siendo perseguida con penas de cárcel e incluso de muerte en demasiados países. Países a los que muchos de nosotros siguen viajando y haciendo turismo como si la cosa no fuera con ellos.

Porque para la Iglesia y la derecha más recalcitrante seguimos siendo unos enfermos, desviados o tarados que no merecemos tener los mismos derechos que el resto de los españoles. Por más que lo disfracen de tolerancia y libertad de expresión siempre será homofobia y discriminación pura y dura.

Porque las agresiones al colectivo LGTBI han crecido de manera brutal en 2016 y es que el riesgo de que te partan la cara por ir de la mano con tu pareja se ha convertido en un deporte de riesgo en España cuyo presidente hasta hace poco era contrario al Matrimonio Igualitario (Acordaos de esto cuando vayáis a votar el 26-J)

Porque nos ha costado mucho llegar hasta aquí y simplemente como homenaje a todos los luchadores que han quedado por el camino y los que se han dejado la vida en ello debemos celebrar cada año el Orgullo LGTBI para no olvidar lo duro que ha sido aunque hoy la mayoría no sea capaz de apreciarlo. En memoria de Pedro Zerolo.

Porque desde que el PP retiró Educación para la Ciudadanía de las escuelas e institutos ser LGTBI en edad escolar es motivo de bullying y es que sólo desde la educación en el respeto y la tolerancia conseguiremos que las futuras generaciones sean mucho mejor. Hay que conseguir que colegios concertados y privados dejen de instruir en el odio y la LGTBIfobia.

Porque l@s transexuales siguen discriminados incluso entre el propio colectivo homosexual. Hay que conseguirlo todo para que l@s transexuales puedan vivir con dignidad y puedan ir con la cabeza bien alta no sólo por la noche si no de día y en cualquier lugar. Recordad que l@s trans son hombres o mujeres como tú o como yo y que es labor de todos mejorar sus vidas.

Porque los bisexuales también existen y no son viciosos ni personas que aún no ha definido su orientación sexual. La capacidad de amar es infinita y sólo desde el amor y el entendimiento conseguiremos que todos y todas nos sintamos a gusto con nuestra propia sexualidad.

Y sobretodo porque nos apetece y nos da la gana y nadie nos tiene qué decir lo que podemos o no podemos celebrar. El Orgullo es una fiesta abierta a todo el mundo, donde gays, lesbianas, heteros, bisexuales, transexuales, intersexuales, abuelos, abuelas, los de aquí, los de allá, ateos, cristianos, musulmanes incluso pasivos son bienvenidos y cuantos más seamos mejor lo pasaremos y porque mientras a alguien no le guste que lo celebremos querrá decir que tenemos que celebrarlo más que nunca.