Según explica el Ajuntament, para iniciar una investigación de oficio sería necesario que el vídeo hubiera sido rodado en presencia de menores o personas discapacitadas. En el supuesto de que alguien denunciara los hecho sí que la Policía Local de Palma iniciaría las diligencias pertinentes por un presunto delito de exhibicionismo, pero posteriormente trasferiría la responsibilidad a la Policía Nacional, que es quién tiene las competencias correspondientes.
El exhibicionismo está sancionado con penas que van desde una multa hasta un posible ingreso en prisión, dependiendo de la gravedad de los hechos.