La sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma ha condenado a 3 años de prisión al exconseller de Turismo Francesc Buils por el pago en 2008 de una factura de 2.999,76 euros al exalcalde de Sóller Antoni Arbona por llevar a cabo un proyecto de márketing de senderismo para la Serra de Tramuntana. En virtud de un pacto con Fiscalía Anticorrupción, Arbona declaró que estos trabajos no se habían realizado.
El tribunal se ampara en las declaraciones de los coimputados que pactaron con fiscalía para probar los hechos: “la prueba fundamental de cargo ha consistido en las declaraciones en parte confesorias prestadas por los acusados Antonio Arbona y Antonio Oliver” relata en el fundamento jurídico primero. También se afirma que “Ninguno de los acusados Oliver, Rebassa y Arbona, llegaron a afirmar con rotundidad que los términos de la orden dada por el Consejero a través del Vicepresidente Balaguer con ocasión de la reunión mantenida en el INESTUR, fuera la de beneficiar a Antonio Arbona con la entrega de 15.000 euros”.
Por parte de la defensa de Buils ya se ha anunciado que se interpondrá un recurso contra la sentencia -correspondiente a la pieza 4 del caso Voltor- ante el Tribunal Supremo.
Buils no ha sido condenado por el pago de otra factura de 12.000 de similares características al demostrar, con los nombramientos del BOIB, que cuando se tramitó él ya no ostentaba la cartera de Turismo. Dejó el cargo a finales de septiembre de 2008. En la sentencia, se afirma que “a diferencia de lo postulado por el Ministerio Fiscal, creemos que solamente es posible imputarle el delito de prevaricación y de malversación respecto de la factura 1/2007”. También se argumenta que no se sabe si su sucesor en el cargo Miguel Nadal Buades “conocía o no cuáles eran las intenciones de su predecesor en el cargo” pero que “autorizó la tramitación del expediente y permitió que se verificase el pago”. Nadal, ordenante del pago de 12.000 euros, no ha sido ni imputado ni testigo de la causa.
La sentencia, cuyo ponente es el magistrado Diego Gómez-Reyno, rebaja la pena solicitada por el fiscal anticorrupción Miguel Ángel Subirán, quien pidió para Buils 4 años años y medio de cárcel.
La pena mayor ha sido para el exdirector del IMET Antoni Rebassa, quien ha sido condenado a cuatro años y medio de prisión por malversación y prevaricación continuada en relación a las dos facturas abonadas a Arbona: la de 3.000 y la de 12.000 euros. Rebassa mantuvo su inocencia durante todo el juicio. En la sentencia, se argumenta que “no intervino en su pago, ni dio la orden para que fuera elaborada” pero que debía “de haber propuesto que no fuera satisfecha”.
Por su parte, los acusados Antoni Oliver y Antoni Arbona, quienes mostraron conformidad con los hechos delictivos relatados por el fiscal, han visto como la pena solicitada por Miguel Ángel Subirán se ha confirmado. Ninguno de los dos entrará en prisión por esta causa al haber sido condenados a un año y medio el primero y a un año el segundo.
La sentencia pone en duda la posición de testigo de Santiago Balaguer, al considerarle como la persona que dio traslado de las órdenes de Buils para la contratación de Arbona. No obstante, si Balaguer no se encuentra imputado es porque tanto la titular del Juzgado de Instrucción número 10 Carmen Abrines como el fiscal anticorrupción Subirán optaron por no imputarlo.
La Audiencia provincial ha remitido la sentencia al juzgado de instrucción para que depure las posibles responsabilidades en que hubiera podido incurrir Santiago Balaguer como testigo.