Empezó azul y acaba blanco
miércoles 21 de mayo de 2014, 18:48h
En el PP un comentario machista tiene pena de 4 días a la sombra y una disculpa pública a la salida. Ese ha sido el castigo para el tardío candidato popular a las elecciones europeas, Miguel Arias Cañete. ¡Cuántas veces se habrá arrepentido de aceptar ser el candidato¡
Cañete empezó la campaña en un tono azul eléctrico-pitufo (que, por cierto, no se ve de noche) y la ha acabado blanco como el papel porque le han tenido cuatro días prácticamente escondido y a la sombra tras su andanada machista al día siguiente de debatir en la tele con su rival, Elena Valenciano.
No espero que estén ustedes de acuerdo conmigo, pero me da la sensación de que coincidiremos en que es la peor campaña electoral que recuerdo. La de más bajo interés, la de candidatos de perfil más gris, y la que menos se han creído los partidos contendientes. Con esto, ¿Qué participación esperamos?.
Al PP no le discutiré la capacidad de Arias Cañete, no le discutiré al candidato sus contactos y experiencia en Bruselas, pero a ambos sí les he de cuestionar el nivel de una campaña electoral en la que primero escondieron a Rajoy y después al candidato.
Y enfrente tampoco hemos visto mucho brillo. Se han pasado media campaña exigiendo que Cañete pida disculpas. Cuando las han tenido, ya no había mucho más que rascar.
Me da que la verdad de la verdad de unos y otros llegará este lunes, con las victoria-derrota otorgadas en las urnas. Unos, a esperar los siguentes datos del paro para ver si pueden mantener el discurso de la recuperación. Los otros, a preparar los motores de unas primarias que se barruntan dolorosas y convulsas.