Més per Palma ha salido al paso de la imputación del alcalde de Palma, Toni Noguera, por un presunto delito de prevaricación al prohibir el alquiler turístico en la ciudad. Señalan que la acusación de prevaricación no es corrupción y argumentan que el alcalde hizo lo que se aprobó en el pleno de Cort para seguir “la iniciativa popular de la Federación de Asociaciones de Vecinos”. Intentan zanjar la cuestión con “el código ético de Més sólo contempla la dimisión en casos de corrupción, y este no es el caso de Antoni Noguera".
La formación cree que “el derecho a la vivienda es fundamental, y este se debe garantizar con todas las herramientas que tiene el Ayuntamiento de Palma a su alcance”. Respecto a la querella de Fevitur que ha conllevado la imputación de Noguera sostienen que “señala el delito de prevaricación, en un caso donde no se aplican los dos supuestos que sustentan esta acusación. Estos dos supuestos son: arbitrariedad en la motivación y contravenir una ley con conocimiento de causa”. Aseguran que la decisión del alcalde se tomó en base a “en informes técnicos y en el interés general”, todo ello “por encima de los intereses turísticos o económicos de determinados sectores”.
Defienden que la prohibición del alquiler turístico no contraviene ninguna ley con conocimiento de causa: “de hecho, era de obligación legal regular el alquiler turístico de acuerdo con la normativa autonómica”.
Més concluye que “defenderemos el derecho a la vivienda y el interés general por encima de los intereses económicos de entidades como Fevitur".