El valor patrimonial de los jardines, mirador y huerto se debe a que su tipología es única y representan el único ejemplo de jardín del siglo XIX que se conserva en Palma. La finca está fechada en el año 1784 y la construcción de la zona verde se realizó entre la segunda mitad del siglo XVIII y principios del siglo XX.
La vicepresidenta del Consell de Mallorca y consellera insular de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Aurora Ribot, ha recordado que los jardines son "un espacio privilegiado para dar un paseo o bien para sentarse a la sombra de algún banco de piedra y pintar. El Archiduque Luis Salvador decía que esta era la mejor panorámica de la bahía de Palma".
Por su parte, el director insular de Medio Ambiente, Josep Manchado ha recalcado que "gracias al taller ocupacional de jardinería organizado por el SOIB, los jardineros del departamento, han hecho una magnífica labor para proteger y conservar los jardines".
Los jardines y el huerto de Natzaret, en el barrio palmesano de El Terreno, es un jardín con influencias del clasicismo, romanticismo y modernismo. La finca y el terreno fueron del Cardenal Despuig, que la compró en 1805 con la idea de convertirla en un museo. Finalmente las obras se depositaron en la finca de Raixa en Bunyola, propiedad del Consell.
UN BIEN A PROTEGER
En 2004, gracias al acuerdo entre el Consell, el Ayuntamiento de Palma y la Fundación Natzaret del Obispado de Mallorca, los Jardines de Natzaret y la posesión fueron declarados como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de jardín histórico.
El Consell se ha hecho cargo del mantenimiento de los jardines desde que se firmó un convenio en 2006 con la Fundación Natzaret del Obispado de Mallorca. Según establece el convenio, la Fundación cedió 3.500 metros cuadrados de los jardines durante un periodo de 25 años.