En el mundo del fútbol, la lacra de la xenofobia no entiende de categorías. El capítulo más reciente ha tenido lugar durante este fin de semana en el choque correspondiente a la fase de ascenso a Primera Regional entre un Maria de la Salut que ejercía como local y Ses Salines. A falta de diez minutos para llegar a los noventa, los visitantes se retiraron del terreno de juego debido a unos insultos racistas proferidos a uno de sus jugadores.
El lamentable incidente fue relatado por el entrenador de Ses Salines, Joan Caldés, en su perfil en la red social Twitter. "Último partido de la temporada con derrota 4 a 0.. en el min 80, decido retirar al equipo del terreno de juego, ya que un par de aficionados han empezado a hacer comentarios xenófobos hacia uno de nuestros jugadores", empieza explicando el técnico.
Caldés subraya que "éste abandona el terreno de juego y acto seguido, todo el equipo lo acompaña. Por respeto, no voy a mencionar el club en el que ha tenido lugar esta situación tan desagradable. ya que no hay que meter a todos los aficionados en el mismo saco...". "Espero que la federación tome medidas, ya que esto es intolerable", zanja el entrenador de Ses Salines.
Uno de sus futbolistas, en concreto Cristian Segovia, ha apuntado: "Partido de Segunda Regional en Maria de la Salut, resultado 4-0, minuto 80, dos jugadores se pican y desde la grada un individuo dice al jugador visitante: "Puto moro". Año 2023".
"Evidentemente, nos hemos retirado del partido. Y pensándolo en frío, me da mucha impotencia. ¿Por qué tiene que irse la víctima y quedarse el agresor? El mundo al revés". lamenta.
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